ESTIMADOS ALUMNOS CON LOS PRESENTES
DESPACHOS JUDICIALES DEBERAN PRESENTAR LOS ESCRITOS CORRESPONDIENTES A CADA UNO
DE ELLOS. LOS MISMOS SE ENCABEZARAN CON SUS APELLIDOS Y DEBERAN CONTENER TODOS
LOS REQUISITOS EXIGIDOS POR LEY.
Nota: Los despachos que a continuación se
transcriben pueden variar de acuerdo al criterio de cada Juzgado, esto no
significa discordancia alguna con la práctica judicial.
DOMICILIO
PROCESAL Y DENUNCIA DEL REAL
(ARTICULO
40):
//Plata, Agosto de 2000
Por constituido el domicilio procesal y
denunciado el real, téngase presente a sus efectos (artículos 40 y 42, del
Código Procesal).
OMISION DE DENUNCIA DEL DOMICILIO REAL
(ARTICULO 41):
//Plata, Agosto de 2000
Por haberse omitido la denuncia del domicilio
real, practíquense en el procesal las notificaciones a que hubiere lugar.
OMISION DE DENUNCIA DEL CAMBIO POSTERIOR:
//Plata, Agosto de
2000
Por no constar en el expediente denuncia
alguna de cambio del domicilio real de la parte demanda practíquese en el
procesal la notificación requerida.
OMISION DE CONSTITUCION DEL DOMICILIO
PROCESAL (ARTICULO 41):
//Plata, Agosto de 2000
Por cuanto en la presentación de fs... se
omitió constituir domicilio procesal, dispongo que las sucesivas providencias te
sean notificadas al actor automáticamente en la forma y oportunidad que prevé el
artículo 133 del C.P.C.N.
CAMBIO DE DOMICILIO (ART.
42)
//Plata, Agosto de 2000
Por constituido el nuevo domicilio procesal,
téngase presente a sus efectos, previa notificación personal o por cédula a la
otra parte (artículo 42 del Código Procesal).
CONSTITUCION DE DOMICILIO PROCESAL EN UN
LUGAR INEXISTENTE, 0 EN CASA DESHABITADA 0 DEMOLIDA, 0 DE QUE, SE HAYA MUDADO EL
INTERESADO, 0 QUE HAYA SIDO DESALOJADA 0 EXPROPIADA, ETC.(ARTICULO
42):
//Plata, Agosto de 2000
En atención a lo informado por el oficial
notificador, y de conformidad con lo que dispone el artículo 42 del Código
Procesal, téngase por cumplida la notificación dispuesta a fs... Asimismo
dispongo que las sucesivas providencias le sean notificadas al actor
automáticamente en la forma y oportunidad que prevé el artículo 133 del código
citado, salvo las excepciones que contempla el artículo 41 del mismo.
DENUNCIA DE DOMICILIO REAL EN UN LUGAR
INEXISTENTE
//Plata, Agosto de 2000
Teniendo en cuenta lo informado por el
oficial notificador, y de conformidad con lo que dispone el artículo 42 del
Código Procesal, practíquese la notificación dispuesta a fs, en el domicilio
procesal, donde se llevarán a cabo las posteriores a que haya jugar.
REPRESENTACION
PROCESAL
MUERTE 0 INCAPACIDAD DE LA PARTE QUE ACTUA
PERSONALMENTE (art. 43)-
//Plata, Agosto de 2000
En atención a lo que resulta de la partida de
defunción acompañada, decreto la suspensión del procedimiento y emplazo a los
herederos, o al representante lega de para que dentro del plazo de 20 días
comparezcan a estar a derecho bajo apercibimiento de rebeldía. Notifíquese
personalmente o por cédula.
JUSTIFICACION DE LA PERSONERIA. EFECTOS (ART.
46 A 52). COMPARECENCIA DEL REPRESENTANTE (ART. 46 y 47):
//Plata, Agosto de 2000
En atención a lo que resulta de la
documentación acompañada, copia de poder, téngase por acreditada la personaría
invocada a todos los efectos legales y por constituido el nuevo domicilio
procesal. Notifíquese.
OMISION DEL ACOMPAÑANTIENTO DE LOS DOCUMENTOS
QUE LA ACREDITAN:
//Plata, Agosto de 2000
Por no haberlo hecho, intimo al peticionante
que dentro de dos: días acredite la personaría invocada en la forma prevista por
el artículo 46 (47) del Código Procesal, bajo apercibimiento de tenerlo por no
presentado.
IMPOSIBILIDAD, (ART. 46, SEGUNDO APARTADO).
//Plata, Agosto de 2000
Por resultar atendibles las razones
expresadas para justificar la transitoria imposibilidad de presentar la
documentación que acredite la personaría invocada, admito a ésta temporalmente y
por el plazo de veinte días hábiles a contar desde la fecha de la presentación,
vencido el cual sin acompañarse aquélla, se tendrá por inexistente la
representación alegada y se anulará de pleno derecho todo lo actuado por el
presentante, con costas a su cargo, y sin perjuicio de su responsabilidad
eventual por el daño que se hubiera producido (artículos 46, segundo apartado, y
48, del Código Procesal).
ACOMPAÑAMIENTO DE COPIA DE UN PODER QUÉ NO ES
GENERAL 0 DE UNO ESPECIAL QUE NO HABILITA PARA INTERVENIR EN DIVERSOS
PROCESOS:
//Plata, Agosto de 2000
Desde que no se trata del caso previsto por
el segundo apartado del artículo 47 del Código Procesal, intimo al peticionante
para que dentro de dos días acompañe el testimonio de la escritura del poder
invocado, bajo apercibimiento de tenerlo por no presentado (57 del CPC).
PEDIDO DE EXHIBICION DEL TESTIMONIO ORIGINAL
(A LA PRIMERA PRESENTACION).
//Plata, Agosto de 2000
De conformidad con lo que dispone la parte
final del artículo 47 del Código Procesal, intimo al peticionante para que
dentro de dos días acompañe el testimonio original de la escritura del poder
invocado, bajo apercibimiento de tenerlo por no presentado (argumento del
artículo 57 del código citado).
IDEM, CUANDO LA INTIMACION SE, FORMULA LUEGO
DE HABERSE DADO INICIALMENTE CURSO A LA PRESENTACION:
//Plata, Agosto de 2000
De conformidad con lo que dispone la parte
final del artículo 47 del Código Procesal, intimo al presentante para que dentro
de dos días acompañe el testimonio original de la escritura del poder allí
invocado, bajo apercibimiento de tener por inexistente la representación alegada
y anular todo lo actuado, a su costa y sin perjuicio de su responsabilidad por
el daño, que hubiere producido. Notifíquese personalmente o por cédula (ídem,
artículo 135, inciso 6º).
PRESEN'I'ACION DEL GESTOR (ARTICULO 48):
//Plata, Agosto de 2000
Por resultar atendibles las razones invocadas
y encuadrar en las previsiones de¡ artículo 48 del Código Procesal, en los
términos y bajo el apercibimiento y responsabilidad que dicho precepto
establece, tengo al peticionante por presentado en el carácter invocado, por
constituido el domicilio procesal y denunciado el real de la parte en cuyo
beneficio pretende actuar.
DENGACION DEL PEDIDO:
//Plata, Agosto de 2000
Por no resultar atendibles las razones que
justifiquen la seriedad del pedido y no advertir la urgencia de los actos
procesales que se pretende realizar; o por no resultar atendibles las
circunstancias que imposibilitan la actuación de la parte a quien se pretende
representar), no ha lugar a la intervención del peticionante.
CESACION DEL MANDATO. RENUNCIA, TERMINACION
DE LA PERSONALIDAD CON QUE LITIGABA EL MANDANTE, MUERTE 0 INHABILIDAD DE ESTE
(ARTICULO 53):
//Plata, Agosto de 2000
Téngase presente a sus efectos y hágase saber
la renuncia del mandato. Intimo al mandante (a la parte que adquirió capacidad,
a los herederos o al representante legal) para que dentro de 20 días comparezca
por sí o por apoderado, a tomar la intervención que le corresponde, bajo
apercibimiento de rebeldía, si la otra parte lo pidiera. NOTIFÍQUESE
PERSONALMENTE O POR CEDULA AL DOMICILIO REAL.art. 53 y 59 del CPCyC
MUERTE, 0 INCAPACIDAD DEL MANDATARIO:
//Plata, Agosto de 2000
Agréguese la partida de defunción acompañada
y, en su mérito, decreto la suspensión del procedimiento. Intimo al mandante
para que en el plazo de 20 días comparezca por si o por aperado a tomar la
intervención que le corresponde bajo apercibimiento de rebeldía si la otra parte
lo pidiera. Notifíquese personalmente o por cédula que deberá dirigirse a su
domicilio real.
REVOCACION DEL PODER (ART.53, INCISO 1º):
//Plata, Agosto de 2000
Por presentado y por parte; por constituido
el domicilio procesal, y denunciado el real. Téngase presente a sus efectos y
hágase saber la revocación del mandato.
UNIFICACIÓN DE LA PERSONERIA (ART. 54);
CITACION.-
//Plata, Agosto de 2000
De conformidad con lo que dispone el artículo
54 del Código Procesal, convoco a los actores a la audiencia del día ? a fin de
tratar la unificación de su representación si ella resultara procedente, bajo
apercibimiento de celebrarse la audiencia con quien concurra y de designar en su
caso repre- sentante de oficio; notifíquese personalmente o por cédula
(artículos 125, inciso 3º, y 135, inciso 6º, del código citado).
APELACION CONTRA LA PROVII)ENCIA QUE, CONVOCA
A LOS INTERESADOS A LA AUDIENCIA; INADMISIBILIDAD:
//Plata, Agosto de 2000
La providencia que convoca a los interesados
a audiencia, a los fines del artículo 54 del Código Procesal, no causa agravio
en los términos del art. 242 inc. 3, de dicho ordenamiento. En consecuencia no a
lugar a la apelación deducida.
REPRESENTACION PROCESAL
//Plata, Agosto de 2000
Se notifica automáticamente. Esta providencia
sólo cabe en los su puestos en los que no se invocan las circunstancias
previstas por los artículos 46, segundo apartado, y 48.
IMPOSIBILIDAD, ETC.(ART. 46, SEGUNDO
APARTADO):
//Plata, Agosto de 2000
Por resultar atendibles las razones
expresadas para justificar la transitoria imposibilidad de presentar la
documentación que acredite la personaría invocada, admito a ésta temporalmente y
por el plazo de veinte días hábiles a contar desde la fecha de la presentación,
vencido el cual sin acompañarle aquélla, se tendrá por inexistente la
representación alegada y se anulará de pleno derecho todo lo actuado por el
presentante, con costas a su cargo, y sin perjuicio de su responsabilidad
eventual, por el daño que se hubiera producido, (artículos 46, segundo apartado,
y 48, del Código Procesal).
ACOMPAÑAMIENTO DE COPIA DE UN PODER QUE NO ES
GENERAL 0 DE UNO ESPECIAL QUE NO HABILITA PARA INTER. VENIR EN DIVERSOS
PROCESOS,
//Plata, Agosto de 2000
Desde que no se trata del caso previsto por
el segundo apartado del artículo 47 del Código Procesal, intimo al peticionante
para que dentro de dos días acompañe el testimonio de la escritura del poder
invocado, bajo apercibimiento de tenerlo por no presentado (argumento del
artículo 57 del código citado).
PEDID0 DE EXHIBICION DEL TESTIMONIO ORIGINAL
(A LA PRIMERA PRESENTACION):
//Plata, Agosto de 2000
De conformidad con lo que dispone la parte
final del artículo 47 del Código Procesal, intimo al peticionante para que
dentro de dos días acompañe el testimonio original de la escritura del poder
invocado, bajo apercibimiento de tenerlo por no presentado (argumento del
artículo 57 del código citado).
CUANDO LA INTIMACION SE FORMULA LUEGO DE
HABERSE DADO INICIALMENTE CURSO A LA PRESENTACION-
//Plata, Agosto de 2000
De conformidad con lo que dispone la parte
final del artículo 47 del Código procesal, intimo al presentante para que dentro
de dos días acompañe el testimonio original de la escritura del Poder allí
invocado, bajo apercibimiento de tener por inexistente la representación alegada
y anular todo lo actuado, a su costa y sin perjuicio de su responsabilidad por
el daño que hubiere producido Notifíquese personalmente o por cédula (ídem,
artículo 135, inciso 6º).
REPRESENTACION DE GESTOR (ARTICULO
48).
//Plata, Agosto de 2000
Por resultar atendibles las razones invocadas
y encuadrar en las Previsiones del artículo 48 del Código Procesal, en los
términos y bajo el apercibimiento y responsabilidad que dicho precepto
establece, tengo al peticionante por presentado en el carácter invocado, por
constituido el domicilio procesal y denunciado el real de la parte en cuyo
beneficio pretende actuar.
DENEGACION DEL PEDIDO:
//Plata, Agosto de 2000
Por no haberse expresado razones que
justifiquen la seriedad del pedido, no ha lugar a la intervención del
peticionante.
CESACION DEL MANDATO. RENUNCIA, TERMINACION
DE LA PERSONALIDAD CON QUE LITIGABA EL
MANDANTE, MUERTE 0 INHABILIDAD DE ESTE (ARTICULO 53):
//Plata, Agosto de 2000
Téngase presente a sus efectos y hágase saber
la renuncia del mandato. Intimo al mandante para que dentro de 20 días
comparezca por sí por apoderado, a tomar la intervención que corresponde, bajo
apercibimiento de rebeldía si la otra parte lo pidiere. Notifíquese
personalmente o por cédula que deberá dirigirse al domicilio
real.
MUERTE 0 INCAPACIDAD DEL MANDATARIO.
//Plata, Agosto de 2000
Agréguese la partida de defunción acompañada
y, en su mérito, decreto la suspensión de procedimiento. Intimo al mandante,
para que dentro de 20 días comparezca por si o por apoderado, a tomar la
intervención que le corresponda, bajo apercibimiento de rebeldía si la otra
parte lo pidiere. Notifíquese. Personalmente o por cédula al domicilio real.
REVOCACION DEL PODER(ART. 53, INCISO 19)-
//Plata, Agosto de 2000
Por presentado y por parte; por constituido
el domicilio procesal y denunciado el real téngase presente a sus efectos y
hágase saber la revocación del mandato
Notifíquese personalmente o por cédula.
UNIFICACION DE LA PERSONERIA (ARTICULOS 54);
CITACION:
//Plata, Agosto de 2000
De conformidad con lo que dispone el artículo
54 del Código Procesal, convoco a 1os actores a la audiencia del día a fin de
tratar la unificación, de su representación, si ella resultare procedente, bajo
apercibimiento de celebrarse la audiencia con quien concurra de designar en su
caso representante de oficio; notifíquese personalmente o por cédula (artículos
125, inciso 3, y 135, inciso 69, del código citado).
APELACION CONTRA LA PROVIDENCIA QUE CONVOCA A
LOS INTERESADOS A LA AUDIENCIA; INADMISIBILIDAD:
//Plata, Agosto de 2000
La providencia que convoca a los interesados
a audiencia, a los fines del artículo 54 del CPCYC, no causa agravio en los
términos del art. 242. Inc.3 de dicho ordenamiento. En consecuencia no a lugar a
la apelación deducida.
DESIGNACION DEL REPRESENTANTE UNICO EN LOS
SUPUESTOS EN QUE NO HAYA SIDO CUESTIONADA LA PROCEDENCIA DE LA UNIFICACION:
//Plata, Agosto de 2000
Por encontrarse reunidos los presupuestos del
artículo 54 del Código Procesal, designo representante único de todos los
actores al doctor... con todas las facultades inherentes al mandato
(artículos 49 a 52 del código citado).
SUSTITUCION DEL REPRESENTANTE UNICO POR
ACUERDO UNANINIE DE LOS REPRESENTADOS.
//Plata, Agosto de 2000
En atención al acuerdo expresado por los
actores, téngase presente a todos los efectos legales la persona de su nuevo
representante único. Notifíquese personalmente o por cédula.
REMOCION DEL REPRESENTANTE UNICO (ARTICULO
55).
//Plata, Agosto de 2000
Con el pedido de remoción del representante
único fórmese incidente por separado en los términos del artículo 177 del Código
Procesal, el cual no suspenderá el curso de la instancia principal (artículos 55
y 176 del código citado). Cumplido, córrase traslado por cinco días al nombrado
y a los demás actores. Notifíquese personalmente o por
cédula.
PATROCINIO
LETRADO
(Artículos 56 a
58)
FALTA DE PATROCINIO OBLIGATORIO DE LETRADO,
SEA QUE LA PARTE ACTUE POR DERECHO PROPIO 0 POR REPRESENTACION (ART. 56 Y 57):
//Plata, Agosto de 2000
De conformidad con lo que disponen los
artículos 56 y 57 del Código Procesal, intimo al peticionante para que en dos
días se haga asistir por letrado patrocinante, bajo apercibimiento de tener por
no presentado el escrito de fojas. Notifíquese por Ministerio Legis.
REBELDIA
(Artículos 59 a
67)
DECLARACION DE REBELDIA (ARTICULO
59).
//Plata, Agosto de 2000
En atención a lo solicitado y por cuanto el
demandado, debidamente notificado, no ha comparecido, lo declaro rebelde
y dispongo que las providencias sucesivas le sean notificadas automáticamente;
notifíquese personalmente o por cédula (artículo 59 del Código Procesal).
REBELDIA E INCONTESTACION. PEDIDO DE
DECLARACION DE REBELDIA DE QUIEN, COMPARECIENDO, NO CONTESTO LA DEMANDA 0 SE LE
TUVO POR NO CONTESTADA POR DEFECTOS FORMALES:
//Plata, Agosto de 2000
La rebeldía (artículo 59 del Código Procesal)
supone la ausencia total de la parte en el proceso o el abandono posterior de
este, motivo por el cual quien haya comparecido y constituido domicilio
procesal, aunque no conteste la demanda no puede ser declarado contumaz. En su
mérito, no ha lugar a la declaración de rebeldía solicitada.
MEDIDAS CAUTELARES CONTRA EL REBELDE (ART.
63).
//Plata, Agosto de 2000
De conformidad con lo solicitado, lo que
dispone los artículos 63, 208 y 212, inciso 1º del Código Procesal y bajo la
responsabilidad del peticionante, decreto contra el demandado declarado rebelde
el embargo preventivo de sus bienes hasta cubrir la suma de $ más la de $ que
estimo prudente en concepto de eventuales, intereses y costas. Para hacerlo
efectivo, líbrese el correspondiente mandamiento (oficio) (o practíquese la
correspondiente notificación.
COMPARECENCIA DEL REDELDE (ART.64).
//Plata, Agosto de 2000
Por presentado y por parte; por constituido
el domicilio procesal y denunciado el real. Ante la comparecencia del demandado,
y de conformidad con lo que dispone el artículo 64 del código Procesal, cese su
rebeldía y rija en adelante el régimen de notificación que en cada caso resulte
de la que disponen los artículos 133 y 135, del código citado.
BENEFICIO DE
LITIGAR SIN GASTOS
(Artículos 78 a
86)
TRAMITE DE LA SOLICI'I'UD-
//Plata, agosto de
2000
Por presentado y por parte; por
constituido el domicilio procesal y denunciado el real. Fórmese incidente por
separado. Con citación del demandado y el agente fiscal, quien
será notificado personalmente o por cédula (artículo 135, inciso 119, del Código
Procesal) (artículo 180, segundo apartado del Código
Procesal), líbrense los oficios pedidos y comparezcan los testigos
ofrecidos a prestar declaración en la audiencia del... (etc.).
Tramita como incidente cuando se refiere a un
proceso ya iniciado (artículo 83, segundo apartado).
ARTICULOS 78 A 86
PRODUCCION DE LA PRUEBA, TRASLADO (ARTICULO
81).
//Plata, agosto de
2000
Por estar producida la prueba ofrecida, de su
resultado córrase traslado al peticionario y a la parte contraria por cinco días
comunes y oportunamente pase a dictamen del señor representante del fisco. Con
su resultado, vuelva. Se notifica automáticamente.
CONCLUSION DEL BENEFICIO (ARTICULO 81).
//Plata, agosto de
2000
De conformidad con lo solicitado y los
elementos de juicio brindados; lo dictaminado por el señor representante del
fisco y lo que disponen los artículos 78, 79, 81, 82, 84 y 85, del Código
Procesal, concedo el beneficio pedido con el alcance de las normas citadas, de
modo que pueda litigar contra. ?.. sin afrontar el pago de las costas u otros
gastos judiciales en tanto no mejore de fortuna. Notifíquese personalmente o por
cédula (artículo 135, inciso 13, del citado código)
APELACION CONTRA LA PROVIDENCIA QUE ACUERDA
EL BENEFICIO (ARTICULO 81):
//Plata, agosto de
2000
Concedo, en relación y al solo efecto
devolutivo (artículos 81 y 243 del Código Procesal), la apelación interpuesta.
Preséntese copia de la sentencia con la aclaración de que se encuentra apelada y
oportunamente remítase el expediente a la Excma. Cámara para la resolución del
recurso (artículo 250, incisos 1º y 3º, del mismo código).
APELACION CONTRA LA RESOLUCION QUE DENIEGA EL
BENEFICIO.
//Plata, agosto de
2000
Concédase, en relación, el recurso de
apelación interpuesto y oportunamente elévese al Superior en la forma de estilo.
ART.82 IMPUGNACION DEL BENEFICIO, TRAMITE
//Plata, agosto de
2000
Por promovido el incidente de impugnación que
tramitará en el mismo expediente y sin suspender los efectos del beneficio ya
acordado, córrase traslado por cinco días al beneficiario. arts. (82 y 18º).
Notifíquese personalmente o por cédula.
ACUERDO DE LA EXTENSION:
//Plata, agosto de
2000
De conformidad con lo solicitado, lo resuelto
a fojas lo que dispone el artículo 86 del Código Procesal y por no resultar que
se hayan modificado las circunstancias entonces tenidas en cuenta, extiendo los
efectos del beneficio otorgado para que, en las mismas condiciones allí
establecidas, el beneficiario pueda también litigar contra...; Notifíquese
personalmente o por cédula (artículo 135, incisos 11 y 13, del código citado).
ACUMULACION DE
ACCIONES Y LITISCONSORCIO PASIVO;
AMPLIACION DI,
LA DEMANDA A OTROS DEMANDADOS;
//Plata, agosto de
2000
Toda vez que la causa no fue abierta a prueba
admito la ampliación de la demanda (artículo 88 - 89 -, del Código Procesal). En
consecuencia, notifíquese el traslado dispuesto. Suspéndase el desarrollo del
proceso hasta tanto se encuentren notificados.
AMPLIACION INADMISIBLE POR MEDIAR APERTURA DE
LA CAUSA A PRUEBA:
//Plata, agosto de
2000
La ampliación de la demanda a otros
demandados es inadmisible cuando ya media notificación de la apertura de la
causa a prueba, aunque aquélla persiga la integración de la litis (artículos 89;
93 y 94, del Código Procesal). En su mérito, y de conformidad con lo que
disponen los artículos 179; 337 y concordantes del mismo código, desestimo el
pedido sin substanciación.
ART. 87 A 89 Y 90 A 96
INTERVENCION OBLIGADA 0 COACTIVA DE TERCEROS.
PEDIDA EN LA DEMANDA:
//Plata, agosto de
2000
... cítese a.. para que dentro de ... días
tome en la causa la intervención que pudiere corresponderle en defensa de sus
derechos, bajo apercibimiento de quedar vinculado a los efectos de la sentencia
que se dicte (artículos 88 -89-, 94 y 96 del código citado); Notifíquese por
cédula (ídem, artículos 94 y 135, inciso 11).
PEDIDA POR EL DEMANDADO, AL CONTESTAR:
//Plata, agosto de
2000
Del pedido de citación de tercero, traslado
al actor; notifíquese personalmente o por cédula (artículo 180 del Código
Procesal).
CITACION (INTERVENCION OBLIGADA DE TERCEROS)
//Plata, agosto de
2000
Por mediar acuerdo de partes, cítese a.. para
que dentro de 10 días tome en la causa la intervención que pudiera
corresponderle en defensa de sus derechos, bajo apercibimiento de quedar
vinculado a los efectos de la sentencia que se dicte (artículos 88 -89-,
94 y 96, del Código Procesal). Notifíquese por cédula (artículos 135, inciso
11; 94 y del citado código). Suspéndase el desarrollo del proceso (ídem,
artículos 89 y 95).
INTERVENCION VOLUNTARIA DE TERCEROS;
PROCEDIMIENTO PREVIO:
//Plata, agosto de
2000
Por presentado, por constituido el domicilio
procesal y denunciado el real. Del pedido de intervención traslado por cinco
días a las partes, notifíquese personalmente o por cédula(art.180 del CPC)
ADMISION DE LA INTERVENCION DEL TERCERO:
//Plata, agosto de
2000
Por mediar acuerdo de las partes, téngase
también a ... como tal, con los alcances de la primera parte del artículo 91 del
Código Procesal y corra la causa según su estado (artículo 93 del mismo código.
Notifíquese personalmente o por cédula (ídem, artículo 135, inciso 6º).
RECURSOS: PROVIDENCIA QUE ADMITE LA
INTERVENCION 0 CITACION:
//Plata, agosto de
2000
La resolución que admite la intervención de
terceros es inapelable (artículo 96 del Código Procesal). En su mérito, no ha
lugar al recurso interpuesto.
IGUAL, PROVIDENCIA QUE LA DENEGO:
//Plata, agosto de
2000
Concedo, en relación y al solo efecto
devolutivo, la apelación interpuesta (artículo 96 del Código Procesal).
Preséntese copia de la resolución apelada y de ... para su oportuna elevación a
la Cámara (artículo 250, incisos 2º y 39, del código citado).
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Vamos a dar comienzo hoy a un acto fundamental dentro de un proceso de
conocimiento, que es la audiencia –denominada así-, “audiencia preliminar” por
el legislador en el artículo 360 de nuestro nuevo Código Procesal Civil y Comercial de la
Nación.
Esta audiencia tiene lugar una vez concluida la etapa de postulación; esto es aquella etapa inicial donde el actor ha formulado cual es su pretensión, cuales son los medios de prueba que eventualmente puedan apoyar sus hechos articulados en la demanda, y fundamentar conforme al derecho. Y, a su vez tanto el demandado, como en este caso hay un tercero que también ha intervenido hayan podido ejercer debidamente el derecho de defensa, de modo tal que podemos considerar o decir que se encuentra trabada la litis. No se presenta esta situación cuando hay inactividad procesal de algunos de los sujetos demandados, o que deba intervenir como tercero, encontrándonos en este caso frente a la hipótesis de la rebeldía si es que el actor lo ha pedido expresamente, o en su caso, o en su defecto de la incontestación de la demanda. Una vez agotada esta etapa de postulación corresponde a través de esta “audiencia preliminar”, pasar a la siguiente, y justamente a esto vamos abocar en este momento. Vamos a explicar un poquito el caso para que comprendamos esta situación.
Este
caso se trata de un accidente de tránsito sin lesiones, donde tenemos quien
reclama, que es el Sr. Lettieri, que se encontraba -en realidad su vehículo-
estacionado sobre la calle Tucumán. Su vehículo –identificado con la letra “A”-
sobre la calle Tucumán, fue colisionado por el vehículo "B", que en este caso
era conducido por la Srta. Jones, que circulaba por la calle Tucumán también. A
su vez este vehículo conducido por la Srta. Jones, fue colisionado por el
vehículo identificado con la letra "C" que es el que conduce el Sr. Rossi.
Resulta
que Lettieri demandó a la Srta. Jones por este hecho, y en realidad se presenta
en el proceso al ejercer el derecho a defensa, es decir al contestar la demanda
la Srta. Jones pide la citación en calidad de “tercero” en los términos del
artículo 94 del Código Procesal, pide la intervención del Sr. Rossi, por el
vehículo identificado con la letra “C”, porque imputa su responsabilidad a él.
Corresponde ahora entonces establecer en esta audiencia volviendo ya a la
audiencia preliminar como continúa el desarrollo del
proceso.
Bueno
ahora yo voy a entrar en un diálogo con las partes y quiero cumplir en primer
lugar con el inciso 6to. del artículo 360 en cuanto establece, perdón el inc. 1º
del art. 360 cuando establece que corresponde invitar a las partes a una
conciliación. Quiero aclarar aquí que como Uds. ya saben existe una etapa
prejudicial de mediación donde ambas partes deben intentar llegar a un acuerdo
por sus propios medios con la intervención del mediador. Evidentemente nos
encontramos en este proceso, en este momento, y en esta etapa donde no han
llegado a un acuerdo, sin embargo es un resorte del juez, una posibilidad ésta nuevamente de intentar,
en función de aquellas conversaciones, una nueva
conciliación.
Yo
le pregunto a la parte actora en este momento si existe alguna posibilidad de
llegar a una conciliación, si han continuado las conversaciones entre las
partes. Doctor, podría usted
explicar.
DR
CAPELA
(abogado actora):
Si Doctor, bueno estuvimos en tratativas como Ud. sabe como figuran en las actas de audiencias
de Mediación, tuvimos dos audiencias de Mediación, la primera de ellas con el
demandado. Se celebró una nueva porque el demandado manifestó que iba a citar a
un tercero, justamente al tercero citado Rossi, y bueno no llegamos a ninguna
conciliación que no tiene que ver con el monto de la pretensión sino con la
responsabilidad. Estamos muy lejos en el tema de responsabilidad. Nosotros
atribuimos la responsabilidad al vehículo de la demandada Jones, y bueno el
demandado le imputa la responsabilidad a este tercero citado que nada tiene que
ver con nosotros en esa supuesta mecánica, así que si bien nosotros estamos
abiertos a reajustar la pretensión estamos lejos en cuanto a la
responsabilidad.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Muy bien, Doctor del Blanco podría Ud. especificarme o puntualizar alguna
cuestión respecto a estas eventuales tratativas
conciliatorias.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Bien nosotros no negamos el accidente, pero sí la mecánica del mismo, y nos
vamos a mantener en nuestra demanda, y con la citación del tercero porque vamos
a insistir con la causa exculpatoria del art. 1113, 2da. Parte del Código
Civil.
DR.
CAPELA
(abogado actora):
Bueno Doctor, será una cuestión que se probará en el trámite del proceso.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE: Como
vemos se ha intentado de alguna forma de llegar a un acuerdo. Si bien el Juez
hasta tiene posibilidades de manifestar fórmulas conciliatorias como lo habilita
el artículo 34, esto es así siempre y cuando partimos de una base mínima que en
este caso sería por lo menos admitir la responsabilidad, pero acá tenemos, que
ni siquiera lo que se denomina el nexo causal, ha tenido lugar de reconocimiento
entre las partes porque el demandado ha pedido la citación de un tercero al que
considera responsable en los términos
del art. 1113, como lo enunció el Doctor del Blanco, es decir un tercero
por quien no deba responder como modo de exoneración de la responsabilidad que
le pudo haber conducido a la demandada Srta. Jones por haber conducido una cosa
peligrosa. Vamos a continuar
entonces con el desarrollo de esta audiencia.
Vamos
entonces al inciso 6to. -ahora sí- del artículo 360, que nos propone
eventualmente –mejor dicho, a mí- la posibilidad de declarar esta cuestión lo
que se llama “de puro derecho”. La cuestión se declara “de puro derecho”, como
uds. saben, cuando no existen controversias fácticas; sino que lo que se limita la
cuestión en el proceso es una discusión en el ámbito jurídico, es decir cuáles
son los términos de interpretación, cuál es el alcance de la norma, o en su caso
por supuesto, qué norma corresponde aplicar al caso. Pero acá la discusión es
más de fondo porque no solamente tenemos una cuestión jurídica sino también
fáctica, que -como dije recién- hace al nexo causal eventualmente que impute la
responsabilidad por este hecho que se está discutiendo. Por tanto -con esto
quiero sintetizar- no corresponde, no puedo declarar la cuestión “de puro
derecho” y sí vamos a pasar al otro punto que sería la eventual consideración de
la “apertura de la causa a prueba”.
Yo tengo la impresión y en esto creo que coinciden ambas partes que no veo oposición a la apertura a prueba sino que justamente lo que están buscando es probar que lo que cada una de ellas ha sostenido, es real, es cierto. Por eso en este punto, no tiene sentido que alguna de las partes argumente el inciso 2do. del artículo 360 que remite al artículo 361 en el sentido de que cualquiera de las partes puede oponerse a la apertura a prueba, con lo cual estamos diciendo que aquel que se opone, lo que quiere es que se declare la cuestión como “de puro derecho”; sería una contradicción. Por eso digo que en este caso ninguna de las partes formula oposición a la apertura de la causa a prueba. Siguiendo el desarrollo de esta audiencia, corresponde fijar los hechos “articulados” que sean “conducentes” para la solución del caso, como dice el inciso 3ro. del artículo 360. Quiero aquí destacar que en la realidad forense, es bastante extraño que el juez fije en el acto de la audiencia los hechos realmente “articulados” y “controvertidos” por las partes. Yo personalmente he visto algunas actas en algunas audiencias de jueces que lo hacen en la realidad pero es la excepción, porque hay una regla no escrita, aún cuando el legislador haya insistido, de que hay una suerte de idea de prejuzgamiento si el juez comienza a nominar y a especificar cuales son los hechos “articulados” que a su vez son “controvertidos”, es decir discutidos, donde las partes no se han puesto de acuerdo y han presentado una discusión sobre esos hechos. Es decir que en este punto tengo que aclarar que el hecho de no establecer cuales son hechos articulados por las partes y que son conducentes, no implica en realidad un incumplimiento, porque hay un establecimiento tácito de los hechos controvertidos a través de la fijación de los medios de prueba que el juez habilita en esa audiencia.
Por lo
tanto vamos a pasar al punto siguiente del desarrollo de ésta audiencia que es,
ya sí entramos a considerar, cuáles son las pruebas que resultan “conducentes” o
“pertinentes”. ¿Qué quiere decir esto? Son pruebas “conducentes” o “pertinentes”
aquellas que dan cumplimiento al “principio de congruencia”, es decir cuando las
partes, el actor en su caso manifiesta los hechos y establece su reclamo, el
reclamo –es decir-, la petición por la cual las partes formulan su pretensión
tiene que guardar relación con las pruebas que se van a producir y eventualmente
por supuesto con la sentencia que debe expedirse sobre esos puntos. Por lo
tanto, vamos un poquito y rápidamente a examinar cuales son los medios de prueba
que las partes han ofrecido, para establecer si esos medios de prueba son
hábiles para fundamentar y acreditar los hechos argumentados, tanto por quien
demanda como por la defensa. De modo que este inciso que acabo de señalar, que
se refiere al inciso 5to. del
artículo 360, me habilita en su caso a rechazar en ésta instancia los medios de
prueba que no corresponden.
Bueno
quiero aclarar también, que como sabemos la prueba “documental” debe ofrecerse
con la demanda y con la contestación, en el acto inicial. La prueba
“confesional”, la declaración de las partes, debe producirse en esta misma
audiencia, una vez, es decir con posterioridad al establecimiento de los medios
de prueba, del resto de los medios de prueba que sean pertinentes. Entonces ya
excluyendo la prueba “documental” que debía ofrecerse y también postergando la
“confesional” que se va a producir con posterioridad, vamos a abocarnos al resto
de los medios probatorios.
Vemos
acá prueba “informativa”. Le pregunto en esto a la actora, vamos a comenzar por
la parte actora para ser ordenados en esto, que ha ofrecido prueba informativa,
puedo ver acá Doctor que en el punto cuarto dice: “Oficio a los Colegios
Públicos de Abogados de Capital
Federal y de San Isidro, a los fines de que informen si
el accionante (el actor), se encuentra inscripto como abogado” y hay otro oficio
seguidamente, otro informe pedido al Garage Tribunales Plaza, “para que informe
si el accionante estaciona su vehículo de Lunes a Viernes indicando en que
horario lo utiliza”. ¿Podría indicarme Ud. Doctor
especificar en esto que hechos pretende Ud. probar?
DR.
CAPELA
(abogado actora):
Sí Doctor, ésta parte lo que pretende acreditar es por un lado el “lucro
cesante”, lo que dejó mi cliente de percibir a consecuencia de no poder
utilizar el automóvil, y por otro lado la “privación de uso del rodado”
justamente por el tiempo que se vio impedido de utilizar el automóvil. Éstos son
los dos extremos que debemos probar con la prueba ofrecida,
Doctor.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bueno muy bien yo acá estoy viendo que Ud. puntualizó porqué motivo ofreció la
prueba; yo acá veo entre los rubros reclamados “daño emergente” al
automotor, es decir el daño que el vehículo “A” sufrió como
consecuencia de la embestida por parte del vehículo "B". Luego
dice “desvalorización del rodado”: Doctor este como sabemos se trata de
un rubro que tiene lugar cuando se han afectado partes “vitales” -denominadas
así- o “estructurales” del vehículo y no cuando se trata de una cuestión
meramente estética o periférica del vehículo ¿Hay aquí Doctor “daños
estructurales” del vehículo a considerar?
DR.
CAPELA
(abogado actora):
Si justamente Doctor, en el taller donde se hizo revisar y presupuestaron los
arreglos del automotor, se informa que se encuentran afectadas partes vitales,
estructuras vitales del automóvil, por ende se reclama el rubro en
cuestión.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE: Bien, partes vitales o estructurales
serían, por ejemplo, afectar el parante lateral del auto que hace a la
estructura de los vehículos modernos que son denominados monocasco, y un golpe
en esa parte deforma prácticamente la solidez del vehículo por el resto de su
vida útil.
Bueno,
vemos acá la “privación del uso del rodado” y entonces como ya sabemos la
“privación del uso” es un rubro que surge de la prueba “in re
ipsa”, es decir la sola producción de la prueba que determine que el
vehículo debió dejar de circular por el plazo o el período de su reparación,
implica necesariamente una privación de su utilización; y esto lleva, esta sola
circunstancia lleva a la necesidad podríamos decir objetiva, de reconocer que el
vehículo no pudo ser utilizado. Es obvio, es evidente, es una prueba evidente.
Sin embargo Ud. puntualizó Doctor que esos dos oficios es decir con la
producción de esas pruebas, pretende acreditar el “lucro
cesante”.
DR.
CAPELA
(abogado actora):
Justamente.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Yo tengo que decirle que el “lucro cesante” no está ofrecido como prueba
en la demanda y Ud. sabe perfectamente como yo que el “principio de preclusión”
impide a las partes retrotraer etapas procesales cumplidas. De modo entonces que
lamentablemente si no ofreció este punto en la demanda Doctor yo se le voy a
denegar; su producción me refiero.
DR.
CAPELA
(abogado actora):
Si Doctor, ésta parte está de acuerdo, no está dentro de la pretensión de la
demanda, no está dentro de los rubros.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bueno, acá el oficial escribiente entonces va a asentar que en los términos del
artículo 364 que se refiere, a la “pertinencia” y a la “admisibilidad”, que la
declaro por lo tanto, no ya "impertinente", sino "inadmisible" por
no haberse ofrecido la prueba correspondiente en el momento de iniciar la
demanda. Vamos a continuar, tenemos acá la prueba testimonial, bueno en esto el
artículo 333 nos pide que especifiquemos ¿con qué finalidad se ofreció la prueba testimonial,
Doctor?
DR.
CAPELA
(abogado actora):
Si exactamente Doctor, pretendemos acreditar la existencia del accidente y la
forma de ocurrencia.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
¿Son testigos del hecho?
DR.
CAPELA
(abogado actora):
Si, son dos testigos presenciales del hecho, que vieron como se produjo el
accidente.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Entonces vamos a pedirle al oficial escribiente que provea esta prueba
testimonial y designe las audiencias para citar a los testigos. Bueno también es
procedente la prueba pericial mecánica obviamente porque como vemos necesita
acreditar la mecánica del hecho, que está muy controvertida y también los daños
sufridos por el vehículo, así que ésta prueba la vamos a admitir y acá
corresponde por lo tanto hacer un sorteo que lo vamos a hacer antes de finalizar
la audiencia, un sorteo de acuerdo a la lista de peritos que nos remite la
Cámara de Apelaciones para saber cual es el profesional, el experto que va a
pronunciarse sobre éstos puntos.
Doctor, acá veo que Ud. ofreció una “pericial psicológica” dice.
DR.
CAPELA
(abogado actora):
Correcto Doctor “pericial psicológica”. En la demanda se reclamó el “daño
moral”.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
El “daño moral”, si veo que está reclamado.
DR.
CAPELA
(abogado actora):
Si, en el último punto de la pretensión, el último rubro.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bueno pero Doctor voy a hacer uso de la misma norma que cité, el artículo 364
del Código Procesal. Considero que esta prueba de “daño moral” es
impertinente. Yo por lo que estoy viendo los puntos acá, lo que ha sido objeto
de reclamo, y la prueba documental además acompañada, me parece que esto
apuntaría a una “incapacidad psicológica”, que no es el caso Doctor acá
yo no veo que esta medida de prueba mantenga relación, por lo tanto yo Doctor le
voy a denegar este medio de prueba.
DR.
CAPELA
(abogado actora):
Sí, sí, en la demanda no se reclama “incapacidad psicológica”, es
solamente “daño moral” así que esta parte acepta la denegación de la
prueba.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Así será asentado en el acta, entonces. La parte demandada, está bien, la prueba
mínima, no tengo nada que decir porque además están discutidos los
hechos.
Nos
queda y vamos a proceder ahora a continuar en la audiencia la recepción de la
prueba confesional, como dije al
comenzar el acto, ésta es una prueba que permite a las partes prestar
declaración, como Uds. saben se trata de una prueba muy técnica desde el punto
de vista de lo que es el Código Procesal, del Procedimiento en sí; es una prueba
para un gran sector y cada vez más de procesalistas que está considerada como
ineficiente, sin sentido, por todo este tecnicismo de que está rodeada esta
prueba que en su oportunidad tuvo especial aplicación por el Derecho Canónico
supuestamente por la importancia que tenía, pero vemos que cada vez se va
depreciando más. Pero bueno vamos a tomarla igual, yo soy afecto a admitir todas
aquellas pruebas que sean importantes para esclarecer el hecho. Como ya dijimos
recién, acá tenemos: el Sr. Lettieri que es el actor, y la Srta. Jones la
demandada, quien por lo que estoy viendo aquí, la Srta. Jones ha pedido la
citación de tercero –sabemos- del identificado con la letra "C"
que es el Sr. Rossi. Yo voy en primer lugar, en su caso procederíamos a recibir
la declaración del tercero citado que está ofrecido como
testigo.
DR.
MERODIO
(abogado tercero):
Si Usted me permite Doctor yo me voy a oponer a esta prueba porque es
impertinente, por dos motivos: fundamentalmente por un tema de responsabilidad
donde tanto el demandado como el tercero estamos discutiendo la responsabilidad,
donde cada uno se endilga responsabilidad en el hecho, donde existirían
intereses contrapuestos; y por otro lado sometería a mi parte a la producción de
una prueba testimonial que sería factible de encuadrar su conducta en los
términos del artículo 275 del Código Penal en un falso testimonio, por lo cual
solicito sea desestimada por su impertinencia la prueba ofrecida por la
demandada.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Así está asentado en el acta y le voy a dar traslado de esta oposición a la
parte demandada, que es la que ofreció esta prueba en estas
condiciones.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Nosotros mantenemos la prueba Doctor, Ud. resuelva lo que
corresponda.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bien, quiero aclarar en este punto, que la prueba confesional es una prueba que
está prevista para que ambas partes presten declaración como dije hoy, sin
embargo deben ser -técnicamente hablando- “partes” en el sentido contrapuesto,
es decir “parte actora” por un lado desde el punto de vista procesal y “parte
demandada” por el otro, es decir enfrentadas procesalmente lo que habilita la
prueba confesional, pero acá tenemos la particularidad de que no se produciría
la prueba confesional entre “partes contrapuestas”, sino entre la demandada y el
tercero citado. Creo, como señaló el Doctor Merodio, que la prueba testimonial
respecto de un tercero cuyo interés se encuentra en contraposición con el del
demandado en este proceso, es inconveniente que se produzca para su declaración,
que se recurra a la prueba testimonial, porque en caso de no decir la verdad
podría el tercero eventualmente verse implicado en un supuesto o en una hipótesis de
falso testimonio. Entiendo que eventualmente hubiera sido más adecuada la prueba
confesional, pero yo me voy a limitar a pronunciarme sobre el medio de prueba
aquí ofrecido. Así que Doctor del Blanco vamos a proceder entonces a rechazar
por este artículo 364 la prueba testimonial que Ud. ha ofrecido en relación al
tercero citado.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Bien, entonces hacemos el replanteo de la prueba conforme al 379 del Código Procesal Civil.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Muy bien, que se asiente esta cuestión en el acta. Y sobre este punto debe
decirse que las cuestiones de “producción”, “denegación”, y “sustanciación” de
la prueba resultan inapelables. El Doctor del Blanco hizo una reserva de
replanteo, esto es en los términos del art. 260 inciso 2do. del Código Procesal,
esto quiere decir que dentro del 5to. día que el expediente -una vez dictada
sentencia- llega a la Cámara de Apelaciones el Doctor podrá fundamentar los
motivos por los cuales eventualmente puede solicitar que esta prueba sea
producida por haberse ofrecido. En esta instancia no queda otra alternativa más
que acatar o aceptar la decisión del Juez que en este caso fue denegar la
producción de esta prueba. Y a continuación correspondería proceder con la
recepción de las pruebas confesionales ofrecidas, entre las partes, ahora si en
el sentido técnico es decir entre el actor que tengo aquí a mi izquierda y
una vez cumplida esa prueba puede
ser la del demandado, el que tengo acá a mi derecha.
Se
hallan reservados los derechos de autor Ley 11.723.
UCES
UNIVERSIDAD DE CIENCIAS EMPRESARIALES Y SOCIALES
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Vamos a continuar como dijimos en la audiencia con la producción de la prueba
confesional. La confesión es una declaración emitida por cualquiera de las
partes acerca de la verdad de los hechos controvertidos y conducentes como dice
acá en esta parte de este dibujo, “controvertidos” aquellos hechos de
discusión de las partes, o que las partes no se han puesto de acuerdo, y
“conducentes” esto es relevantes para la solución del litigio para la
solución de los casos. Justamente, acá esta la normativa referida: artículos
359, 360, inciso 3ero. del Código Procesal. Bien, tales hechos
“controvertidos” y “conducentes” deben estar referidos a hechos
pasados. Esto es así porque si hablamos de hechos presentes nos estamos
remitiendo al caso, por ejemplo, de la prueba pericial o bien alguna prueba
documental, algún documento que se realice durante el transcurso del proceso. A
su vez, tales hechos deben referirse a una actuación personal del absolvente
como dice el artículo 411, esto es hechos realizados por quien declara, o que
han pasado por él mismo, o de los cuales él tiene conocimiento personal. Y a su
vez, finalmente, como último requisito que tiene que ver con el concepto de
“objeto” de este medio de prueba, tal declaración mejor dicho los
“hechos” que son “objeto” de esta declaración, deben ser desfavorables a quien
declara (denominado absolvente) y
favorables al ponente, es decir a quien “pone” el pliego de
posiciones.
La prueba confesional es una categoría de testimonio, que está en función de los hechos representados, según nos explicaba Carnelutti, como dije también al comenzar esta exposición, Calamandrei la consideraba “reina de las pruebas”, pero en verdad esto ha caído bastante en desuso, porque se ha convirtiendo en un tecnicismo cada vez más estricto. En definitiva Devis Echandía, aquel jurista colombiano nos destaca que lo rescatable y central de la prueba confesional es que constituya un “acto de voluntad consciente” por parte de aquel que presta la declaración.
Bien, cuales son los requisitos subjetivos en lo que hace a la admisibilidad de este medio de prueba, esto es, los debe reunir aquel que presta declaración: la “calidad” de “parte”, esto es, la calidad procesal suficiente para realizar actos procesales válidos. A su vez en función de esto podemos delimitar o establecer limitaciones acerca del sujeto, desde el punto de vista subjetivo. Desde este punto de vista, los menores de 21 años no pueden prestar declaración salvo mediante padre o tutor, los menores adultos pueden hacerlo con autorización judicial o bien también con venia judicial o del padre o tutor; y tampoco pueden hacerlo los dementes, y tampoco aquellos sordomudos que no se saben dar a entender por escrito, como tampoco los penados del artículo 12 del Código Penal, es decir con condenas mayores a tres años.
La
“absolución de posiciones” que así se denomina en definitiva; si bien la
“confesión” es un medio de prueba, la “absolución de posiciones” es la
declaración en si misma y así se denomina cuando tal declaración está realizada
en el contexto de un proceso bajo juramento o promesa de decir verdad frente a
un interrogatorio, cumplido o formulado por escrito, y en el contexto de la
normativa procesal. Esta absolución de posiciones o confesional debe ser, dentro
de las características fundamentales, realizada en forma judicial, verbal, y
también debe ser provocada. Es decir provocada en el proceso a través del
instrumento necesario que es el pliego de posiciones. Finalmente como una
cuestión introductoria vamos a señalar que los requisitos de lugar, tiempo y
forma relativos a este medio probatorio que están enunciados en el 409 del
Código Procesal.
Así
en cuanto a la forma de citación, ésta debe realizarse por cédula. Dicha cédula
debe diligenciarse al menos con tres días de anticipación, tres días hábiles de
anticipación excluyendo por
supuesto el día de la notificación y el día de realización del acto, puede
reducirse tal plazo a un día en cuyo caso esa disposición o resolución judicial
debe estar transcripta en la cédula de notificación con la advertencia o el
apercibimiento aquel que se notifique, que en definitiva es como dijimos, el
absolvente que en caso de no concurrir podrá ser tenido por confeso, es decir
como rebelde, se le produciría en su caso lo que se denominaría una "Ficta
Confessio". A su vez quien concurra a la audiencia sólo tiene el deber o la
carga de esperar tan sólo treinta minutos una vez que fue designada la
audiencia, para el día y hora en que fue designada, de lo contrario podrá dejar
constancia en el libro de asistencia y luego retirarse sin haber incumplido con
esto ninguna carga procesal.
En
lo que hace al lugar en que debe realizarse esta prueba, por supuesto es la sede
del juzgado siempre que el absolvente que es el que tendría que prestar
declaración se domicilie en el radio de 300 Km. desde la sede del juzgado. Más
allá de esta distancia deberá prestar declaración ante el juez que corresponde
en turno por competencia territorial. También debe aclararse de que como se
trata de este medio probatorio, es de carácter personal no puede sustituirse su
declaración. La declaración del interesado no puede ser sustituida por ningún
apoderado, salvo en los términos del artículo 405 cuando se trata de hechos por
los cuales debe confesar aquel que realizó una gestión en lugar de la parte, o
cuando se trata de un representante legal en cuyo caso puede asignar o designar
a su vez a un tercero que lo haga en su lugar siempre que ese tercero designado,
cuente con facultades suficientes para obligar a la entidad representada. Por
eso muchas veces en este tipo de
audiencia no se realiza, o no se cumple este acto cuando se presenta, por
ejemplo, un abogado con un simple poder, pero que no alcanza porque no tiene
suficientes facultades para obligar, sí representar pero no para obligar al
absolvente. Y como digo, es de carácter personal y esto determina a su vez una
pequeña situación en lo que hace al lugar de notificación, porque aquel que
actúa por derecho propio debe ser notificado en el domicilio constituído,
¿porqué? porque ha constituído precisamente donde ha fijado un domicilio en el
proceso donde deben realizarse las notificaciones. En cambio cuando se trata de una notificación
perdón, de aquel que actúa por apoderado, este acto que es la prueba
confesional, debe producirse ante el juez competente de su domicilio, esto es el
"domicilio real", entonces quien actúa por apoderado salvo que en alguna
oportunidad procesal haya constituído domicilio en el proceso en otras palabras
que aquel que actúa por apoderado lo viene haciendo o realizando desde que
comenzó el proceso su declaración debe prestarla ante el juez de su domicilio
real, si en cambio actuó por derecho propio, es decir que ha constituído
domicilio en el proceso debe prestarla ante el juez donde tramita la
causa.
Bueno,
realizadas estas aclaraciones finalmente voy a señalar lo que hace a la forma de
presentación del pliego. El pliego de posiciones debe presentarse hasta media
hora antes de comenzar la audiencia. Esta formalidad tiene que ver con una parte
histórica, digamos, de la prueba confesional que era la cuestión de la
sustitución de pliegos porque a veces se especulaba sobre esta cuestión. Y el
abogado solía tener dos pliegos de posiciones, uno que lo presentaba en el
expediente y a veces lo sustituía al momento mismo de comenzar la audiencia si
tenía conocimiento que el absolvente no se iba a hacer presente en la audiencia,
entonces en este último pliego por supuesto incluía o formulaba afirmaciones que
eran realmente inverosímiles e increíbles de ser reconocidas por aquel que tenía
que prestar declaración. Para evitar esta especulación es que se exige que el
pliego se presente por lo tanto media hora antes de comenzar la audiencia. Por
supuesto, el pliego puede contener un número determinado de posiciones que puede
ser ampliadas a lo largo del curso de la audiencia.
Vamos
a proceder entonces ahora en primer lugar a recibir la prueba confesional que ha
puesto la parte actora, en relación a la demandada. Por eso se encuentra aquí
sentada para prestar declaración la Srta. Jones que como ya dijimos es quien se
encuentra demandada, por haber supuestamente colisionado al vehículo del
actor.
Srta.
Jones: “Ud. se encuentra bajo juramento o promesa de decir verdad”. Quiero
aclarar este punto que se han hecho sucesivas cuestiones en orden a la validez
de un juramento o promesa prestado, frente al artículo 18 de la Constitución
Nacional, en el sentido de que nadie puede ser obligado bajo juramento de
declarar en su contra. Sin embargo la Corte Suprema de Justicia ha señalado en
reiteradas oportunidades que esta prohibición de declarar en contra de sí mismo
bajo juramento es inaplicable al caso de las declaraciones en sede civil, es
decir queda solamente limitada o vedada la declaración bajo juramento o promesa
de decir verdad, a las causas penales. Bien vamos entonces a continuar.
“Para
que jure como cierto que Ud. impactó con el automóvil Ford que Ud. conducía, el
vehículo Fiat”.
SRTA.
JONES
(demandada):
Si es cierto, pero aclaro que la mecánica del accidente fue
distinta.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bien, vamos a pasar a la SEGUNDA, por favor, vaya asentando las
respuestas.
“Para que jure como cierto que el vehículo Fiat, propiedad del actor, se encontraba estacionado”.
SRTA.
JONES
(demandada):
Sí es cierto.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
TERCERA: “Para que jure como cierto que se encontraba tal como se indica en la
posición anterior al momento del impacto, es decir
estacionado”.
SRTA.
JONES
(demandada):
Que sí es cierto.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
“Que el vehículo conducido por la demandada impactó al vehículo del actor en su
parte trasera”.
SRTA.
JONES
(demandada):
Si es cierto, pero aclaro que la mecánica del accidente fue
distinta.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bien. “Que el vehículo de la demandada impactó con su parte
delantera”.
SRTA.
JONES
(demandada):
Que sí es cierto, pero aclaro que la mecánica del accidente fue
distinta.
JUEZ DIAZ SOLIMINE: La SEXTA posición: “Que el accidente de autos, se produjo ya que la demandada no tuvo dominio del vehículo”.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Me opongo Doctor a esa pregunta.
Me opongo a esa pregunta, a la sexta, dado que hay que reformularla porque está en sentido negativo, está induciendo al absolvente a declarar en contra de sí mismo.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Quiero aclarar en esta oportunidad, que es usual que el abogado explique a su
cliente en un sentido bastante llano, digamos, cual es el alcance del tecnicismo
un poco de este medio de prueba, que ciertamente es riguroso ya que por ejemplo
el artículo 411 nos establece con claridad la forma en que deben realizarse las
posiciones, esto es las afirmaciones que contienen el pliego de posiciones que
venía yo acá formulándole a la demandada así estableciese. Esta norma que las
posiciones deben ser claras y concretas no deben contener más de un hecho, deben
ser redactadas en forma afirmativa, y que versarán sobre puntos controvertidos y
por supuesto conducentes como vemos es muy técnico. Por eso el Doctor del Blanco
ha planteado una aclaración en verdad sobre esta posición porque la vamos a
reiterar: “Para que jure como cierto el accidente de auto se produjo ya que la
demandada no tuvo el dominio de su vehículo”. ¿Qué es lo que está mal formulado
acá?. Está mal formulada la afirmación de un hecho negativo donde dice que se
produjo el accidente porque la demandada "no tuvo el dominio de su
vehículo", por supuesto decíamos recién acerca de la forma en que deben ser
redactadas las posiciones, estas deben redactarse en un sentido
afirmativo.
Yo puedo afirmar un hecho positivo o puedo afirmar un hecho negativo, pero la realidad es como venía acá redactándose esta pregunta o esta posición, puede dar lugar a confusión, entonces es un deber del juez tratar de aclarar lo más posible para que aquel que preste declaración comprenda el concepto que se le está preguntando.
Entonces
yo la voy a reformular y voy a decir: “Para que jure como que es cierto el
accidente de autos -que así se asiente en el acta por supuesto-, se produjo ya
que la demandada perdió el dominio de su vehículo” y no “que no tuvo dominio del
vehículo”.
SRTA.
JONES
(demandada):
Si es cierto pero fue por culpa de terceros.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bien, última posición: “Que la demandada con su forma de conducir ocasionó al
automóvil del actor daños materiales, más desvalorización de la
unidad”.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
No, no conteste por favor.
Me opongo a esa pregunta Doctor hay que reformularla tiene más de un hecho esa pregunta.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bien, exactamente el Doctor del Blanco ha planteado una corrección que la
pregunta contiene más de un hecho, bien exactamente decíamos recién que no podía
contener más de un hecho, así que de oficio la vamos a
reformular.
“Para que jure como cierto, que la demandada con su forma de conducir ocasionó al automóvil del actor daños materiales”.
SRTA.
JONES
(demandada):
Que no es cierto.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
“Para que jure como que es cierto que Ud. ocasionó con su vehículo al automóvil
del actor desvalorización de la unidad como consecuencia”.
SRTA.
JONES
(demandada):
No, no es cierto.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bien como ven ha hecho algunas aclaraciones, porque cabe aclarar acá con
respecto a las contestaciones las respuestas deben ser también como así también
las posiciones en el sentido afirmativo, en igual sentido, las respuestas deben
ser categóricas: “Es cierto, o no es cierto” y luego pueden entrar a realizar
como dijo la Srta. Jones algunas aclaraciones, que estime pertinente. Ella en
todo momento ha mantenido una posición deslindando responsabilidad civil
respecto de su accionar.
Bien vamos ahora a continuar entonces con las posiciones de la parte demandada hacia el tercero.
Por
favor Sr. Rossi. Pese a que yo he rechazado la producción de la prueba
testimonial, porque así la ofreció el demandado respecto del tercero, sabemos
que de acuerdo al artículo 378 que se refiere a los medios de prueba en el
código procesal, la prueba debe producirse por aquellos medios ofrecidos por las
partes y aquellos por los cuales el juez también disponga.
Entonces
yo voy a disponer en este acto, digamos, la reconducción de la prueba que
ofreció el demandado. El demandado la ofreció como testimonial para que preste
declaración el tercero recordemos que hemos planteado la situación por la cual
no se admite una prueba confesional entre partes que no son contrarias en el
sentido procesal, como ocurre aquí entre el demandado y el tercero que ocupan
una misma posición procesal, pero en función de amplitud de la prueba y esta
norma que acabo de citar 378 voy a reconducir la prueba, es decir la voy a
nominar nuevamente a mi modo de ver como una prueba probable, la vamos a admitir
no como prueba testimonial, porque no queríamos hacer incurrir al tercero
eventualmente en falso testimonio como su calidad de testigo, pero como dije
también hace un rato, cuando hay intereses contrapuestos entre demandado o
demandados contrapuestos y no cuando ambos tienen interés común para tratar en
conjunto de descalificar la pretensión que reclama el actor, acá inversamente a
esa situación resulta que el demandado y el tercero se endilgan mutuamente
responsabilidades. Por esa razón voy a reconducir la prueba como confesional.
Como ocurrió con el caso de la srta. Jones Ud. se encuentra bajo juramento o
promesa de decir verdad.
Entonces
vamos a abrir el pliego del demandado respecto del
tercero.
“Para
que jure como cierto que Ud. cruzó la intersección de las calles Tucumán y
Paraná de Capital Federal, con semáforo en luz roja”.
SR.
ROSSI
(tercero):
No, no es cierto.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bien, “Para que jure como cierto que Ud. impactó con su vehículo Dodge, el
vehículo de la, demandada marca Ford”.
SR.
ROSSI
(tercero):
No , no es cierto.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
¿Va hacer alguna pregunta Doctor?
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Si voy a ampliar el pliego si Ud. me permite en los términos del artículo
415.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bien este artículo 415 al que se refiere el Doctor del Blanco, que se puede
realizar en cualquier estado del proceso y donde las partes pueden formularse
más allá del tecnicismo de la prueba confesional. Tiene una dinámica propia que
por supuesto se aproxima mucho más a lo que es un testimonio común, que a todo
este tecnicismo de la prueba confesional en relación a como deban formularse en
sentido afirmativo. Acá entramos en una cuestión de preguntas, es mucho más
dinámica. Es resorte del juez también admitirlas o no y es conocida como
“preguntas recíprocas” por el artículo 415 del Código Procesal. Así que el Juez
tiene facultades de admitirlas o desestimarlas cuando considera que son
superfluas o improcedentes.
Doctor Del Blanco puede Ud. formular su pregunta.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada): Si “Para que jure como cierto y diga a
que velocidad circulaba en el momento del impacto”.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Puede Ud. responder, Sr. Rossi.
SR.
ROSSI
(tercero):
No, no recuerdo a que velocidad iba en ese momento.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Aunque éstas preguntas son formuladas, tienen una dinámica particular, no por
eso escapan a la hipótesis en forma subsidiaria o analógica y como estamos en
una misma audiencia de posiciones y el declarante, existe una continuidad entre
las absoluciones de posiciones y esta pregunta recíproca se le hace extensiva
por supuesto la aplicación de ciertos aspectos normativos que regulan la prueba
confesional. No olvidemos que se trata de hechos personales o de conocimiento
personal.
Entonces acá se le pregunta más o menos a qué velocidad y es muy razonable esta pregunta ¿porqué?, y es muy típica además en este tipo de proceso. Imagínense Uds. lo que sería inimaginable, hacer 50 preguntas para que jure como es cierto, si venía a 40 o 41 Km. para ver en cual de ellas dice “sí es cierto o no es cierto”. Entonces, el punto es aclarar un hecho personal utilizando este mecanismo; pero yo debo señalarle al Sr. Rossi y advertirle en realidad que tratándose de hechos personales si Ud. no recuerda el hecho o se mantiene en no recordar el hecho se asentará tal cual Ud. lo responde, pero esto puede implicar que Ud. entra en una confesión ficta, es decir una confesión tácita, un reconocimiento implícito de la pregunta al momento de dictar sentencia, si existen otros medios de prueba que puedan abonar o reforzar lo que está preguntando. Y acá bueno, a ver si Ud. hace un poco más de memoria y nos puede decir más o menos a que velocidad circulaba y sino asentamos su respuesta.
SR.
ROSSI
(tercero):
40 Km por hora.
JUEZ
DIAZ. SOLIMINE:
Bien, así se asienta. ¿Otra pregunta?
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada): Yo no.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bueno muchas gracias. Vamos entonces con el pliego, ahora que el tercero ha
puesto a la parte demandada.
Bueno “Para que jure como cierto que Ud. cruzó con la luz el semáforo en rojo”.
SRTA.
JONES
(demandada):
No, no es cierto.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
“Para que jure como que es cierto como que al momento del accidente circulaba en
forma distraída”.
SRTA.
JONES
(demandada):
No, no es cierto.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bien ahora le advierto Doctor Merodio, este pliego tiene la firma de su cliente,
pero no su firma, o la firma del abogado.
DR.
MERODIO
(abogado tercero):
Si me permite Su Señoría, lo suscribiría en este acto.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Aún cuando yo he comenzado con la declaración de la Srta. Jones en verdad, el
sobre cerrado conteniendo las posiciones, se encontraba firmado por el Doctor
Merodio que es el Abogado del tercero, sin embargo, no así el pliego de
posiciones, es decir el documento en función del cual debe prestar su
declaración. Y en esto cabe recordar que el artículo 56 2do. párrafo del Código
Procesal que se refiere al patrocinio obligatorio, establece que debe existir o
contar con la firma del letrado y por lo tanto, no se admitirán, la presentación
del pliego de posiciones ni de interrogatorios, que no lleven firma del letrado,
por eso es que corresponde y correspondería en este acto subsanar esta omisión y
así ha ocurrido.
Continuando con la declaración entonces: “Para que jure como es cierto que Ud. es la única embistiente del vehículo del actor”.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Me opongo Doctor en los términos del artículo 414 a esa
posición.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE: Bueno que así se asienta en el acta, es
un derecho por supuesto, que si bien no tiene los testigos que deben declarar la
verdad salvo algunas puntuales limitaciones por razones de decoro etcétera, no
ocurre lo mismo con las partes del proceso.
La parte si bien declara bajo juramento o promesa de decir verdad tiene un área reservada establecida por el artículo 414 que acaba de citar el Doctor del Blanco, conforme el cual puede negarse a responder, el declarante puede negarse a prestar declaración y esto implica, no que la pregunta no vale o que no tiene efecto, implica que tal negativa o abstención de contestar en verdad, va a ser valorada al momento de dictar sentencia. Es decir si al momento de dictar sentencia el juez advierte que la oposición en verdad responde a que el hecho no era conducente, o sea el Juez no observó que se formuló la oposición, pero el hecho no era inconducente, es decir no era relevante, para la solución del caso o directamente era distinto o extraño al objeto del proceso, entonces verdaderamente era correcta la oposición a declarar.
Pero
si la posición en cambio era muy clara y debía el absolvente, haber prestado
declaración, porque era vinculado, o estaba vinculado a un hecho controvertido,
un hecho discutido en el proceso y en ese caso tratándose de un hecho de
actuación personal o de conocimiento personal del absolvente, se tiene en el
momento de la sentencia por reconocido o por contestado, es decir en forma
afirmativa ese hecho.
Y
aquí creo que vale la pena aclarar aquellas hipótesis de la denominada "Ficta
Confessio", la “Confesión Ficta” o “confesión tácita”, es decir aquellos casos
en los cuales se infiere que las actitudes asumidas por la parte contra quien se
pide la prueba, importan un serio reconocimiento de los hechos que son el objeto
de la prueba, y esto se presenta cuando de acuerdo al artículo 413, 414 del
Código procesal, es el caso que acabamos de explicar: es la oposición a que la
parte preste declaración. También ocurre y –perdón- quiero cerrar esta cuestión,
que ante esa oposición del Doctor del Blanco, solo lo vamos a “tener presente la
oposición formulada para su oportunidad”, así se suele proveer esta cuestión,
que quiere decir establecer esto o cuando se realice la sentencia, el alcance de
esta negativa. Bien.
El
artículo 417 es otro, es la segunda hipótesis de “Confesión Ficta” o “Ficta
Confessio”, es decir cuando existe una incomparecencia injustificada de aquél
que debe ser el absolvente a la audiencia. Acá han comparecido las partes, pero
en el caso de haber sido citado como decíamos dentro del 3er. día hábil ante la
audiencia, por cédula, con el apercibimiento o la intimación de concurrir y no
lo hace, en ese caso al momento de la sentencia se le tiene por efectivamente
contestados y reconocidos todos los hechos que surgen del documento que
constituyen el pliego de posiciones por supuesto, salvo que existiere otra
prueba que abonare o se opusiere claramente al hecho reconocido como podía ser
una prueba pericial por ejemplo o de otro tipo.
Otra
hipótesis de la “Ficta Confessio” la constituye cuando estando la parte
prestando declaración afirma no recordar el hecho y siempre que las
circunstancias fácticas hicieren inverosímil esa afirmación. Tiene que ser
recordarlo por ser un hecho personal.
También
cuando el día de la audiencia la parte puede no concurrir por ejemplo, porque
está enferma. Entonces en esos casos, tiene la posibilidad de justificar su
inasistencia con un certificado médico, pero este certificado médico debe
contener, "la fecha", "el lugar donde está el enfermo” y "el tiempo que durará
la enfermedad”, para permitir de esta forma la designación de una nueva
audiencia en otra oportunidad y también –esto en cuanto al tiempo que durará la
enfermedad-, el lugar para que, porque la otra parte o las otras partes pueden
impugnar ese certificado, en cuyo caso el juez tiene el deber de remitir a un
médico del Servicio Médico del Poder Judicial a la casa o al lugar donde se
encuentre el absolvente para constatar que efectivamente está enfermo, por eso
lo del lugar, y la fecha por supuesto para saber que es sobreviniente la
enfermedad.
Fíjense
que tan importante son estos elementos que en caso de omitirse alguno de ellos
si vamos a los anales de jurisprudencia casi sistemáticamente, vamos a
encontrar, que la consecuencia de la omisión de un elemento de éstos es la
prueba considerada como “Confesión Ficta”, es decir como “confesión tácita” por
haber justificado en forma indebida, injustificadamente la inasistencia a la
audiencia.
Y
también finalmente cuando hablamos de que se pueda dar el caso de que algunas de
las partes deba ausentarse del país. Sobre el particular establece el artículo
421 que la prueba confesional debe anticiparse a la audiencia normal establecida
en el proceso, y no postergarse como era con anterioridad. Es decir, que cuando se va a producir la audiencia, si
la parte viaja o está de viaje al exterior o inclusive al interior, pero no se
encuentra presente, por más que se pretenda acreditar esta circunstancia el juez
debe en tal caso tomar nota de la cuestión, pero no puede justificarse esa
inasistencia porque no se había hecho en debida forma. Y en consecuencia, en
síntesis es el último caso o hipótesis de “Confesión
Ficta”.
Volvamos,
damos por finalizado el acto de la audiencia, donde hemos celebrado por tanto la
“audiencia preliminar”, integrando los medios de prueba que hemos declarado
procedentes, hemos recibido también la declaración de las partes, esto es las
distintas absoluciones de posiciones, la “prueba confesional” cumpliendo así con
todas las hipótesis o preceptos del art. 360 del C.P.C.C.
Se
hallan reservados los derechos de autor Ley 11.723.
UCES
UNIVERSIDAD DE CIENCIAS EMPRESARIALES Y SOCIALES
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bueno, hoy vamos a continuar con la audiencia relativa a la Prueba Testimonial
del caso que venimos desarrollando. Por lo tanto debemos definir quien es el
testigo. Se trata de una persona distinta de las partes y del tribunal u órgano
que debe resolver la cuestión, que declara respecto de hechos pasados que ha
percibido a través de los sentidos, no solamente lo que vio también pudo haber
sido lo que escuchó; puede haber sido una cuestión de inmisiones respecto al
calor; todo aquello que ha pasado por los sentidos puede ser objeto de la
declaración del testigo, y en eso consiste esencialmente lo que es la prueba
testimonial. Hay que decir que el testigo o los testigos deben ser ofrecidos
junto con la demanda o contestación de la demanda, en este caso, también el
tercero que interviene debe ofrecer una lista de ellos, (de los testigos)
indicando con que objeto establece el artículo 333 del Código Procesal, es decir
qué sentido persigue que el testigo preste esa declaración. Por lo tanto con esa
finalidad también de identificar al testigo, se debe indicar el nombre, la
profesión, el domicilio, y también cual otro dato en su caso que sea relevante
para establecer su identidad.
Bien, ¿quiénes pueden llegar a ser ofrecidos como testigos?
En
realidad cualquier persona mayor de 14 años -nos dice el artículo 426-, que en
su caso deberá, como testigo, una vez que se hace presente ante el tribunal
cumplir con dos deberes, ya no cargas, sino deberes del testigo frente a la
sociedad. Esto es, por un lado "comparecer", es decir venir al tribunal con la
idea de "prestar declaración", y en segundo lugar ésta situación, es decir
prestar declaración; éstos son los dos deberes fundamentales que tiene el
testigo. Solamente pueden exceptuarlos de este deber de prestar declaración,
cuando pueda verse involucrado en cuestiones, digamos de carácter penal o
relativas mas bien a una exposición de enjuiciamiento como digo penal o que
pueden afectar a través de esa declaración, secretos de naturaleza militar o de
seguridad o relativos a cuestiones industriales o de patentes. Por todas estas
cuestiones, puede el testigo ser relevado como así, como las pruebas de un
secreto profesional como puede ser
–por ejemplo- la fuente, supongamos en el caso de la hipótesis de la investigación de un periodista cual ha
sido la fuente de su noticia. Bien, aquellos que son menores de 14 años no
podrían declarar en calidad de testigo, podríamos admitir únicamente la
eventualidad como aquellos medios de prueba no establecidos por el código y esta
situación habría que evaluarla en el momento de la sentencia en el sentido cuál
es el grado de comprensión que el testigo pueda tener a pesar de ser un menor de
14 años.
En
lo que hace al aspecto de la exclusión, porque tenemos que hablar necesariamente
de los testigos que han sido por la ley considerados como excluidos y a esto se
refiere el 427 del código procesal.
A)
Quienes son excluidos, es decir cuales son las circunstancias de la exclusión.
Las circunstancias tienen que ver con el parentesco, es decir, razones de sangre
que tienden a preservar la solidaridad familiar, a esto apunta la exclusión de
los testigos, porque se entiende que puede verse afectada la armonía familiar,
si tienen que prestar declaración los consanguíneos o afines en línea directa de
las partes, esto es en el caso de línea directa, padres, abuelos, hijos, nietos,
aquellos que están excluidos, también el cónyuge por su puesto, aunque estuviere
separado legalmente. De todos modos todos estos testigos excluidos, sabemos que
por consanguinidad o por afinidad se trata de un parentesco de orden legal.
Todos estos testigos pueden igualmente comparecer ante el juez si así se
solicita para reconocer documentación, en este aspecto no existe exclusión
alguna. Y en lo que hace a la forma esto decimos los testigos excluidos.
Volvemos a la idea de que si el testigo tiene mas de 14 años, entonces en ese
caso tiene el deber de comparecer, nos quedamos con esto.
Y
vamos a la forma de citación. El testigo para prestar declaración, el juez
designa dos audiencias, pero la que tiene carácter de citación obligatoria es la
primera audiencia. El testigo debe comparecer y prestar declaración, pudiendo
también en su caso justificar su incomparecencia por escrito y el juez, si le
justifica esa comparecencia, queda habilitado ese testigo para concurrir a la
segunda audiencia.
Si
el testigo no ha justificado su incomparecencia a la primera audiencia puede ser
traído por la fuerza pública, concretamente mediante un oficio librado a la
oficina que tiene la Policía Federal en el Poder Judicial, o en su caso a una
comisaría, depende esto de la circunscripción, con la finalidad de traer al
testigo a la segunda audiencia por la fuerza pública, esto es ir a buscarlo a su
domicilio y hacerlo concurrir ante el juez. En esto no importa que deba prestar
declaración a un tribunal penal o civil, nada cambia la idea de ese deber del
testigo de declarar.
Estas
audiencias, ambas audiencias se notifican por cédula en el domicilio denunciado,
y con el apercibimiento indicado que establece el artículo 431; es decir:
concurrir a la primera, y si no justifica concurrir por la fuerza pública a la segunda. El testigo debe entonces
prestar declaración ante un juez siempre.
Lo
hará ante el juez de la causa si está domiciliado dentro de un radio de 70
kilómetros, y mas allá de esa distancia deberá concurrir ante el juez competente
que corresponda a su domicilio. Una vez que el testigo presta declaración
entonces será sometido a un juramento y a lo que se llama un “interrogatorio
preliminar”, esto es, una serie de preguntas tendientes a establecer la
idoneidad del testigo, tendientes a determinar el grado de acercamiento que el
testigo tiene frente a las partes, en una palabra tendiente a ver o sondear lo
más objetivo que pueda ser su declaración respecto de las partes. Esto es un
entendimiento de hoy, aunque en realidad en la antigüedad, estas preguntas
tienen que ver con que las aldeas eran muy pequeñas y cuando comparecía alguien
de otro lugar, entonces había que determinar bien de donde venía esta persona, y
ver como fueron las circunstancias por las cuáles ha conocido los
hechos.
También
tengo que decir que usualmente las audiencias de testigos no son tomadas por el
juez. Recordemos en esto que el artículo 125 del Código Procesal, permite al
juez entre otras cosas delegar la recepción de la prueba testimonial en el
secretario. Por lo tanto el secretario tendrá entonces a su cargo la
responsabilidad de recibir la declaración o establecer la forma de recepción de
la declaración de los testigos, esta es la forma habitual porque además hay una
necesaria distribución del trabajo dentro de lo que es el personal del tribunal.
Y nuestras audiencias se caracterizan por ser así, y así lo establece Palacio
como una hipótesis de “oralidad actuada”; esto quiere decir que concurre quien
debe prestar declaración, lo hace, y una vez que preste su declaración se hace
una síntesis que se vuelca en un acta. Y también vamos h ver aquí una diferencia
importante, cuando vemos en la justicia norteamericana donde el juez realmente
no alcanza a ser un “director del proceso” como se lo comprende en nuestro
medio. Es decir el juez en nuestro medio o quien lo represente en la audiencia,
suele tener un rol más activo en lo que hace a la dinámica de interrogación del
testigo, a la forma en que se lleva la audiencia adelante, quizás esencialmente
la forma de llevar la audiencia por supuesto en Estados Unidos también es un
sistema distinto, lo hace el juez, pero sin embargo, el juez en esa oportunidad
va dirigiendo la audiencia, casi como se dirige el tránsito, pero no tiene una
injerencia activa, no suele llegar hasta el fondo de la cuestión sino que se
limita a escuchar lo que las partes o en su caso los testigos quieren
declarar.
Vamos
a ver también acá una diferencia importante, porque en la audiencia anterior
vimos la declaración de las partes denominada como “prueba confesional” e
instrumentada a través del “pliego de posiciones”. Acá en cambio, tenemos la
prueba testimonial, caracterizada como digo tener el deber de comparecer y decir
verdad del testigo, puede ser prestada a través de un instrumento que puede ser
escrito –que es el interrogatorio-, o puede ser oral.
Bueno
vamos a comenzar con esta audiencia con esa salvedad que recién dije de que
justamente no es el juez quien la toma, o si no que está delegada en el
secretario. Vamos a pedirle acá al audiencista que haga pasar a la testigo
Córdoba que ha ofrecido la parte demandada.
Puede
tomar asiento por favor.
OFICIAL
ESCRIBIENTE: ( a la testigo Córdoba) Me permitiría su
documento.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Inmediatamente tenemos que decir que el documento resulta indispensable para
poder identificar a la persona que se tiene adelante para prestar declaración.
Podría ser el Documento, sabemos que el D.N.I. es en realidad el único en forma
estricta que acredita identidad ante organismos públicos, pero aunque sea
mientras tenga una cédula de identidad es suficiente para entender que está
acreditada, y además se le hacen otras preguntas supletorias para recibir la
declaración del testigo. Nosotros vamos seguidamente a formular el
“interrogatorio preliminar” que yo me refería porque también es conocido como
"generales de la ley". Recién dije que tiende a establecer justamente la
idoneidad del testigo y además vamos a ver que son preguntas que se le va a
formular a la testigo, que son de carácter general. Esto quiere decir que a todo
el mundo que declare como testigo se les van a formular.
Bueno Ud. está bajo juramento de decir verdad –le digo a la testigo Lucíla Córdoba- y entonces esta interrogación que le vamos a hacer es: “¿Cuál es su nombre, estado, profesión y domicilio?”.
TESTIGO
LUCILA CORDOBA:
Mi nombre es Lucila Inés Córdoba, mi estado civil soltera, me domicilio en
Uruguay 552 de Beccar Provincia de Buenos Aires y soy
estudiante.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
“¿Ud. es pariente de alguna de las partes en este juicio?”. En este caso el actor se llama el Sr. Letieri, la
demandada Sta. Jones, y hay un tercero citado que es el Sr. Rossi; si es que Ud.
digamos conoce a alguna de las partes, en un sentido mejor dicho, si tiene
consanguinidad o afinidad respecto de ellas.
TESTIGO
LUCILA CORDOBA:
No, no conozco a ninguna de las partes.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
“¿Podría decir si tiene algún interés directo o indirecto en el pleito?”, esto
quiere decir en términos reales un no esperar cobrar, un no como consecuencia
del resultado del juicio, sino más bien sentirse beneficiada de alguna de las
partes con su declaración.
TESTIGO
LUCILA CORDOBA:
No, no tengo interés en ninguna de las partes.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
“¿Podría decir Ud. si es amiga íntima o enemiga de alguna de las partes con su
declaración?”.
TESTIGO LUCILA CORDOBA: No soy ni la amiga íntima, ni enemiga de ninguna de las partes.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Finalmente “si es dependiente, acreedor o deudor de alguno de los litigantes o
si tiene algún otro tipo de relación con ellos”.
TESTIGO
LUCILA CORDOBA:
No, no tengo ningún tipo de relación con los litigantes.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bien esto se asienta en el acta, en realidad sintéticamente si les comprenden o
no las generales de la ley, supongamos que hubiera dicho, si soy amigo íntimo
del actor o del demandado o si me debe el actor tantos pesos en un juicio así,
así, describiéndolo; esta circunstancia, no impide la recepción de la
declaración del testigo.
Antes existía lo que se denominaba "tacha de testigos". La posibilidad que cualquiera de las partes tenía que pedirle al juez si es que el testigo estaba declarando, estaba incurso, es decir le correspondían algunas hipótesis de preguntas: las “generales de la ley”, permitía plantearle al juez que lo excluya, es decir que realmente lo tacha al testigo, para que no se reciba su declaración. Esto ha cambiado absolutamente y entonces tenemos los testigos excluidos a los que me refería, y tenemos la otra posibilidad de que aún cuando le comprendieran algunas de las “generales de la ley”, como digo yo, amigo íntimo, acreedor o deudor o enemigo, nada de esto en realidad lo excluye de su declaración, se debe recibir su declaración, y luego en el momento de la sentencia el juez deberá valorar cuál es el alcance que ha tenido ese aspecto que declaró como comprendido en las generales de la ley; es decir en que medida aún cuando sea amiga íntima de alguna de las partes, no le impide esto decir la verdad. Por tal motivo es que debe recibirse siempre la declaración del testigo. Vamos, una vez que hemos cumplido con esto -las “generales de la ley”- a continuar con el interrogatorio, que en este caso la testigo Córdoba ha sido ofrecida por la parte demandada.
Doctor
del Blanco, Ud. que la ha ofrecido a ver si puede, ya que no puntualizó, sobre
qué puede declarar.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Le vamos a hacer las preguntas "in voce".
Para que jure como es cierto.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Perdón Doctor es INDICATIVA.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Ah ¡no!, ya prestó juramento. “¿Para que diga el testigo si sabe y le consta e
indique los motivos por los cuales declara el día de la
fecha?”.
TESTIGO LUCILA CÓRDOBA: Yo presencié un accidente ocurrido entre las calle Paraná y Tucumán, por eso presto declaración.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Perdón quiero aclarar a la testigo que no puede mirar a ningún abogado, ni a
ninguna de las partes, solamente puede dirigirse a aquel que en este caso sea el
Secretario que va llevando la audiencia, porque se pueden transmitir algunas
señas, relativas a la declaración.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
“¿Para que indique el lugar de ocurrencia del mismo?”.
TESTIGO
LUCILA CÓRDOBA:
Entre las calles Paraná y Tucumán, específicamente en la calle Tucumán con
dirección a la calle Callao.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
“¿Para que indique las condiciones climáticas al momento del
suceso?”.
TESTIGO
LUCILA CÓRDOBA:
Era un día normal y las condiciones climáticas eran las
normales.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Para que describa “¿Cómo ocurrió el siniestro mencionado?”
TESTIGO
LUCILA CÓRDOBA:
Yo estaba, tengo un kiosko allí en la calle Tucumán y sentí un golpe fuerte, y
por eso es que dirigí la mirada para ese lugar y ví que un automóvil marca Ford
colisionaba con otro automóvil.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Para que indique “¿Qué tipo de señalización regulaba el tránsito vehicular en el
lugar?”
TESTIGO
LUCILA CÓRDOBA:
Hay semáforos en ese lugar.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Para que indique si pudo...
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Doctor me permite ¿Puede dar Ud. la razón de sus dichos? ¿Cómo sabe Ud.? Todos
éstos hechos ha tomado Ud. conocimiento, ¿de qué forma ha dicho?, porque no
quedó muy claro.
TESTIGO
LUCILA CÓRDOBA:
Yo trabajo en un kiosko, que está ubicado en las calles Paraná y Tucumán y tengo
vista directa a la calle por eso es que presencié el
accidente.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
“¿Para que indique si pudo ver el mismo al momento del
accidente?”.
TESTIGO
LUCILA CÓRDOBA:
No me queda claro.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Si pudiera Ud. aclarar más la pregunta que no...
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Ud. en la pregunta 7, se le preguntó para que indique que tipo de señalización
regulaba el tránsito vehicular en el lugar, y Ud. respondió. Ahora en la 8, es
la pregunta para que indique si pudo ver el mismo al momento del accidente, me
estoy refiriendo al semáforo.
TESTIGO
LUCILA CÓRDOBA:
Si pude ver el semáforo y tenía luz verde para el auto que colisionó al otro,
justamente el auto marca Ford.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
“¿Para que diga el testigo si el accidente se debió al gran congestionamiento
del tránsito existente?”.
DR.
CAPELA
(abogado
actora):
Me opongo Doctor, esta parte, la parte
actora se opone.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bueno Doctor ¿Quiere fundamentar su oposición Doctor?, Si hacemos salir a la
testigo.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
(A la testigo Córdoba) ¿Se puede retirar un minuto?
DR.
CAPELA
(abogado actora):
Sí, el fundamento es que la pregunta formulada por la parte demandada es
indicativa, y le sugiere a la testigo la respuesta. Le pido que en tal caso la
reformule.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Vamos a correr traslado de la oposición a quien ha sostenido la pregunta en
forma inicial, es decir la demandada.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Mantengo la pregunta 9 y le pido a Su Señoría que resuelva la
cuestión.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bueno, aquí va entonces a reformularse la pregunta, y vamos a preguntar a la
testigo si existía congestionamiento de tránsito, porque la pregunta era “que el
accidente se debió al gran congestionamiento de tránsito”. Es indicativa y entre
las formas las preguntas nunca pueden sugerir las
respuestas.
En esto observamos absolutamente lo contrario de lo que ocurría con la prueba confesional que tenía que ser afirmativa; afirmar la existencia de un hecho, y aquí es lo contrario, no pueden sugerir la respuesta, por eso es que la vamos a reformular, en la forma que yo acabo de aclarar; pero que pasa el testigo nunca puede presenciar esta situaciones incidentales dentro de la audiencia porque puede captar algún fundamento de la oposición que está planteando y luego tomarlo como propio para formular una negativa a responder, por ejemplo. Así que ahora vamos a continuar con la audiencia.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bueno la pregunta es “para que diga si había congestionamiento de tránsito al
momento de producido el accidente”.
TESTIGO
LUCILA CÓRDOBA:
No, no había congestionamiento.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bueno muy bien, alguna pregunta más.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Voy a seguir preguntando, “Para que diga si el automóvil Dodge del tercero
citado cruzó con luz roja”.
DR.
CAPELA
(abogado actora): También me voy a oponer
Doctor.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Puede retirarse un minuto (a la testigo).
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Yo le pido al juez que resuelva, mantengo la pregunta.
DR.
CAPELA
(abogado actora):
Yo voy a pedir imposición de costas
Doctor.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Doctor (al Doctor del Blanco) si Ud. mantiene la pregunta voy a tener que
resolver la cuestión y por lo que la testigo dijo, que si mal no recuerdo venía
habilitado el Ford, estaría respondida, así que yo tendré que hacer en ese caso
un incidente, voy a tener que disponer la imposición de costas probablemente.
Bueno no se si va a desistir de la pregunta.
DR. DEL BLANCO (abogado demandada): Bueno en ese caso la desisto.
DR.
CAPELA
(abogado actora):
Bueno la primer repregunta es para que termine de aclarar la testigo, ¿cómo fué
la mecánica del accidente? si puede seguir aclarando, bueno porque la testigo
indica que se escucha el impacto ¿y que más ve? después del impacto Ud. dirige
la mirada ¿y que más ve? como termina ese vehículo que cruza el
semáforo.
TESTIGO
LUCILA CÓRDOBA:
El vehículo marca Ford choca con otro auto que estaba adelante y a su vez al
vehículo marca Ford lo choca otro auto de atrás.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Voy a hacer ahora una pregunta de oficio porque el juez puede hacerlo, quiero
preguntarle: ¿Cómo se encontraba el vehículo Fiat?. Sí, el Ford choca con un
vehículo Fiat, bueno ¿en que posición el vehículo Fiat se encontraba, si estaba circulando
o no?
TESTIGO
LUCILA CÓRDOBA: Estaba
estacionado.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Esta parte no tiene más preguntas.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
(A la testigo Córdoba) Se puede retirar pero permanezca acá cerca de la
sala.
A ver si puede llamar al testigo SCHASKY.
OFICIAL
ESCRIBIENTE:
(al testigo Schasky) Podrá permitirme por favor su Documento.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Puede decir Ud. su nombre, edad, estado, profesión y
domicilio.
TESTIGO SCHASKY: Soy Marcelo Schasky vivo en Avda. del Libertador 1950 Olivos, soy de profesión Abogado y tengo 23 años.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Quiero aclararle que Ud. se encuentra bajo juramento de decir verdad, es decir
está obligado a decir toda la verdad. Se trata de un testigo ofrecido y citado
por el Sr. Rossi.
Diga Ud. si es pariente por consanguinidad o afinidad. Es decir si tiene parentesco de sangre o por su esposa o suyo digamos con alguna de las partes, el Sr. Letieri, el Sr. Rossi, la señorita Jones.
TESTIGO
SCHASKY: No, no lo tengo.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Puede decir si tiene algún interés directo en el juicio, algún interés
particular en el sentido de estar beneficiado con el resultado del proceso, o
piensa beneficiarse con su declaración.
TESTIGO
SCHASKY:
No, no tengo ningún tipo de interés.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Puede decir si Ud. es amigo íntimo o enemigo de alguna de las
partes.
TESTIGO
SCHASKY:
No, no lo soy.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Si es dependiente, acreedor o deudor de alguna de ellas.
TESTIGO
SCHASKY:
No, no lo soy.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Entonces, vamos a superar el “interrogatorio preliminar” o “generales de la
ley”, y a pasar al interrogatorio del Doctor Merodio por el tercero
citado.
DR.
MERODIO
(abogado
tercero):
Le voy a preguntar al testigo si sabe, o cómo ha tomado conocimiento de la
presente audiencia y a qué efecto.
TESTIGO
SCHASKY:
En el día 22 de Febrero me encontraba paseando a mi perro en la calle Paraná,
donde pude presenciar un accidente de tránsito.
DR.
MERODIO
(abogado tercero):
Podría relatar como ocurrió el accidente.
TESTIGO
SCHASKY:
Yo lo que pude observar desde mi posición fue que un automóvil marca Dodge
embistió a un automóvil marca Ford como me dio la impresión que tenía luz
verde.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Podría aclarar “¿cuál de los dos vehículos tenía luz
verde?”.
TESTIGO
SCHASKY:
El automóvil marca Dodge.
DR.
MERODIO
(abogado tercero): Para mí eso sería
suficiente.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Bien (al Doctor del Blanco) Ud. Doctor alguna pregunta.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Sí “¿Para que diga el testigo si antes de ingresar al tribunal se reunió con el
tercero citado?”.
DR.
MERODIO
(abogado tercero):
Me voy a oponer Doctor, quiero que salga el testigo. Me voy a oponer a la
pregunta que le quiere formular el Doctor porque no hace a la cuestión que debe
relatar el testigo, que es los hechos que percibió con sus
sentidos.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
Yo la mantengo a la pregunta.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Este tipo de pregunta suele plantearse en la audiencia cuando aparecen aspectos
que son contradictorios entre los testigos entonces es usual que se busque una
forma de a veces llegar a la verdad, o a veces ejercer algún tipo de presión
para descalificar, tendiente a descalificar al testigo, o mejor dicho a la
declaración del testigo en definitiva que no es favorable a quien plantea esta
cuestión. Fijémonos que aquí, y es porque es realmente usual que el abogado
cuando cita al testigo también escuche su declaración, y esto no es una cuestión
que afecte a la ética profesional: escuchar la declaración del testigo antes,
antes de la audiencia. Porque si alguien ofrece un testigo, el abogado es lógico
que escuche su declaración, que además puede ser contraria a los propios
intereses de su defendido. Entonces, si partimos de la base que una vez que el
testigo se sienta, presta declaración y declara, su declaración queda
incorporada al proceso por el principio de “adquisición procesal”, queda
incorporada al proceso. No puede si es desfavorable a su defendido, el abogado
no puede decirle al juez o a quien tome la audiencia que deje sin efecto, que
toda su declaración o que desista, ya es tarde para desistir por eso digo que es
normal y lógico que quien defiende o ejerce derecho de defensa lo haga
íntegramente, escuche la versión del testigo antes de presentarlo a la
audiencia. Puede ser ésta una cuestión que puede derivar eventualmente en algún
otro tipo de acción. Normalmente las preguntas de esta naturaleza se reciben en
las audiencias, así que vamos a hacer pasar al testigo para escuchar su
declaración.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
(Al doctor del Blanco) La pregunta ¿puede repetirla
Doctor?
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
(al testigo Schasky) Si antes de entrar en esta audiencia Ud. se reunió con el
tercero citado.
TESTIGO
SCHASKY:
No, no tuve ningún tipo de encuentro, como Ud. vió.
DR.
DEL BLANCO
(abogado demandada):
No más preguntas.
JUEZ
DIAZ SOLIMINE:
Hay, a propósito de esta última pequeña incidencia desde que se realizó la
audiencia, yo decía que puede derivar en algún otro tipo de situación.
Normalmente tenemos que decir que puntualmente se refiere al artículo 449 del
Código, que se refiere al falso testimonio u otro delito. ¿que nos dice esta
norma? Que si la declaración ofrecida, digamos ofreciera por si, “indicios
graves” o circunstancia que determinaran o pudieran derivar en la comisión de
delitos por parte del declarante, entonces, el juez podrá decretar la detención
del presunto culpable y remitirlo a disposición del juez competente. Es
comunmente nominado como falso testimonio, es realmente muy difícil hablar de
“indicios graves” cuando un testigo presta declaración, porque tiene que ser
algo realmente muy evidente, para afirmar que el testigo ha mentido, por tanto
también muchas veces se pide un testimonio de la declaración del testigo que se
considera falsa y se la hace girar hacia la justicia penal, justamente para que
se instruya la eventual comisión de este delito. Pero ¿cuál es la realidad?,
¿qué es lo que ocurre con esta situación?. Ocurre que en países sobre todo en
los de carácter anglosajón, donde todo el andamiaje del valor de lo que es un
proceso se sustenta esencialmente en la verdad de la declaración de los dichos
de las partes y de los testigos, si falla este aspecto, como una estantería
ocurre que se cae. Entonces no se puede permitir que este aspecto falle, y por
eso es realmente gravísima la sanción penal que le puede caber a una persona por
el sólo hecho de faltar a la
verdad, de decir mentiras inclusive por entrar, ingresar, pasar por la aduana, y
presentar una declaración jurada que no es real. A ese punto llega el valor que
se le da a la declaración. No ocurre esto en la realidad entre nosotros, porque
siguiendo la idea, si ese testigo, mejor dicho si esa declaración de la cual se
hizo un testimonio y fue girado a la justicia de instrucción se realiza un
sumario penal, normalmente la óptica de apreciación de los hechos es distinta.
Ahí ocurre justamente en nuestro país que normalmente para hablar de falso
testimonio tiene que haber la declaración de testigo, en este caso SCHASKY,
tiene que haber sido falsa y que además no alcanza con eso; la realidad es que
el juez civil vaya a dictar la sentencia, tiene que haber sustentado como
elemento fundamental para establecer la responsabilidad en este caso, en la
declaración del testigo Schasky. Si no la hubiera considerado un elemento
central no podríamos afirmar que hay falso testimonio y esto en consecuencia nos
lleva a considerar que el juez penal no podría resolver esta cuestión (si hay o
no falso testimonio), hasta tanto se decida en definitiva lo que ocurra en este
proceso civil.
Bueno, creo que aquí damos por finalizado este trámite de juicio de proceso en lo que tiene que ver la “oralidad actuada” en el proceso.
Se
hallan reservados los derechos de autor Ley 11.723.
UCES
UNIVERSIDAD DE CIENCIAS EMPRESARIALES Y SOCIALES
JUEZ DIAZ SOLIMINE: Vamos a dar hoy lugar a lo que constituye la etapa de ejecución
dentro del proceso, sea éste un proceso de conocimiento o un proceso de ejecución,
hablando de –fundamentalmente- la Naturaleza del Título. El Título que puede
dar lugar a la ejecución puede ser de naturaleza tanto Judicial como
Extrajudicial. Si es Extrajudicial serán aquellos títulos que como dice la ley
“traen por sí mismos aparejada ejecución”, es decir que no necesitan
probar aquellas circunstancias causales o fácticas que le han dado lugar a ese
título. Y estaríamos allí en el caso de un “proceso ejecutivo” llamado así,
que técnicamente constituye un proceso “mixto” porque no es el título
mismo el que moviliza la ejecución, sino que el título da comienzo al proceso
de ejecución, pero el proceso ejecutivo se trata de un “proceso de
conocimiento limitado” de modo tal que la función de apremio comienza con la
sentencia de remate. Esta última está prevista en el artículo 551 primer párrafo
del CPCCN y se limita en su caso después de haber analizado las defensas que
puede oponer el demandado a llevar adelante la ejecución o bien el rechazo de
ésta. Así ocurre en el proceso ejecutivo ya que se basa en un título de
naturaleza extrajudicial. Frente a este título tenemos o complementariamente
con éste los que constituyen Títulos de Naturaleza Judicial. Y éstos
normalmente tienen lugar a partir de la existencia de una sentencia de condena
luego de haber tramitado un proceso de conocimiento. De modo tal que ésta
sentencia de condena impone por sí misma el cumplimiento de una prestación.
Esa prestación puede ser de “dar”, “hacer” o “no hacer” según la
naturaleza de la cuestión que ha sido planteada en el proceso de conocimiento.
En función de esto vamos a analizar un caso para demostrar qué es lo que
ocurre cuando en un proceso de conocimiento llegamos a la sentencia.
Vamos entonces a comenzar a ver cómo ocurre el procedimiento o mejor dicho el proceso que llega a la sentencia. La etapa de cumplimiento de la sentencia, en este caso, de “condena a dar sumas de dinero”. Eso vamos a tratar porque podría ser, es decir, esta sentencia de condena a dar sumas de dinero estaría implícito como una condena que dispone cumplir una prestación de “dar”, “dar sumas de dinero”; podría serlo de “hacer” o “no hacer” como mandar a destruir una cosa hecha en forma antirreglamentaria. Por ejemplo, una pared levantada en forma antirreglamentaria de acuerdo a disposiciones de un reglamento de copropiedad; allí nos encontraríamos ante una condena de “hacer”. Pero ahora nos vamos a ceñir al cumplimiento de una sentencia que condena a “dar sumas de dinero”. ¿Cómo hacemos para que el acreedor –que es la gran pregunta- pueda percibir o satisfacer el derecho que nace justamente a partir de la sentencia.
En este caso que vamos a plantear estamos frente a una hipótesis
de un “accidente de tránsito sin lesiones”, y vamos a tratar de abreviar el
sustractum fáctico, es decir aquellos aspectos que han sido valorados
por el juez para llegar a la sentencia de condena. En función de las
presunciones derivadas de la sentencia el juez va a poder determinar sus
conclusiones y condenar o en su caso absolver al demandado. En esta hipótesis
tenemos que un vehículo se encontraba estacionado cerca de la bocacalle
–estacionado- (a), luego uno de los vehículos demandados (b) colisiona al vehículo
estacionado, que por supuesto vamos a ver que es del actor. A su vez contra este
vehículo (b) que colisiona contra el vehículo del actor (a), participó de ese
mismo hecho un tercer vehículo (c) que precisamente vamos a ver, se trata de un
tercero citado en el proceso. Vemos entonces que en la sentencia, o mejor dicho,
una vez dictada la sentencia tenemos: al vencedor (a) cuyo vehículo se
encontraba estacionado, uno de los vencidos que es el demandado en el proceso
(b), que fue el que tuvo un contacto directo con el vehículo del actor –que
es el demandado-, y a su vez éste –que es el vencido o demandado- (y
condenado) que pidió la intervención en el proceso de un tercero citado (c)
que fue quien llevó al demandado a colisionar con el vehículo del actor, que
fue también vencido en la sentencia en los términos del art.94 del CPCCN.
Para poder entonces llegar a una instancia de ejecución de una
sentencia de conocimiento necesitamos una sentencia firme o mejor dicho que ésta
se encuentre firme, en estado de considerarse “firme o ejecutoriada”. Es
decir que debe contener la sentencia o alcanzar la eficacia de la cosa juzgada.
La sentencia está firme entonces cuando ninguna de las partes ha recurrido
contra ella, es decir la han consentido. Y podemos decir que se encuentra
ejecutoriada la sentencia; parece un juego de palabras pero “ejecutoriada”
no es lo mismo que “ejecutada”. Ejecutoriada implica que la sentencia
dictada por el juez de primera instancia fue objeto de recursos, y a su vez esa
decisión del juez, por vía de recurso si es confirmada –si fuera
condenatoria- por la Alzada, es decir por la Segunda Instancia, nos encontraríamos
ante una sentencia “ejecutoriada” de “condena” contra el demandado. Y
también podríamos agregar como otra hipótesis que el juez de primera
instancia haya dispuesto el rechazo de esa sentencia, mejor dicho que en la
sentencia haya dispuesto el rechazo de la condena a pesar de lo cual la Cámara
de Apelaciones haya revocado esa decisión absolutoria para disponer la condena
del demandado. En uno u otro caso lo cierto es que nos encontramos ante una
sentencia firme o ejecutoriada como condición técnica liminar para comenzar a
considerar la posibilidad de ejecutarla. En ésta hipótesis que yo les exhibía,
tenemos que en función de las pruebas producidas, porque existieron testimonios
contradictorios entre los testigos del tercero condenado y el demandado, acerca
de cuál de los semáforos estaba habilitando el cruce, circunstancias que como
los testigos de ambas partes consideraban que estaban habilitados con la luz
verde sus respectivos vehículos, como consecuencia de ello se ha neutralizado
esa prueba y se han aplicado las reglas del tránsito que permiten u otorgan a
quien viene por la derecha la prioridad de paso. Pero donde sí no hay discusión
en este caso fue que el tercero citado cuando se produjo la colisión ya había
ingresado a la bocacalle, lo cual también a su vez implica que si alguien ha
comenzado el cruce, se produce una ruptura de esa regla general de que “quien
viene por la derecha tiene prioridad de paso”. Esto llevó a una condena
solidaria en una proporción de igualdad entre el demandado y el tercero citado
de un 50% contra cada uno de ellos. Condena solidaria que, de acuerdo al artículo
699 del Código Civil hace o permite al actor –en este caso vencedor- ejecutar
indistintamente contra cualquiera de ellos la sentencia o su “quantum”
sin respetar este 50% en relación a cada uno de ellos. Debo aclarar que a
partir de la reforma procesal introducida por la ley 25.488, ocurre que el
tercero no solo, como disponía antes el Código Procesal Nacional sino también
lo disponen en general los Códigos Provinciales, puede ser alcanzado por la
sentencia –decía antes-; esta reforma reseñada permite ejecutar y no solo
que el tercero sea alcanzado –ejecutar no al tercero, obviamente, sino a sus
bienes- la sentencia que en su caso se dicte contra él.
Bueno, entonces nos encontramos que en ésta hipótesis tenemos en
punto al tema de “responsabilidad”. Como acá se establece y yo había
explicado una plataforma sustancial de acuerdo al artículo 1113 párrafo
segundo, segunda parte del Código Civil. Y como el vehículo de la actora
estaba estacionado, ello lleva a que tanto el demandado como el tercero para
probar su falta de responsabilidad o exonerarse deben acreditar que la
responsabilidad es de otro, de otra persona, o para decir que de su parte no
hubo culpa. Por eso fue que el demandado pidió la intervención del tercero. Y
como el vehículo estacionado no constituye una cosa peligrosa entonces no
necesita probar que estaba correctamente estacionado. Ahora bien, tenemos en
distintos colores como se ve acá la “integración de la condena”. Caso de
“daños al automotor” que llega a una suma de $3.500, junto con la
“privación del uso”, pueden ser reclamados por el usuario y no solamente
por el propietario del vehículo, porque quien verdaderamente se encuentra
perjudicado es quien hace uso del mismo. Así se establece en un viejo plenario
de la Cámara Civil. En orden en cambio, a que la sentencia hizo lugar a la
“desvalorización del rodado”, como se ve acá, la “desvalorización”
puede ser reclamada entonces exclusivamente –en cuanto a la “legitimación
activa”- por el propietario del vehículo y no así por el usuario porque solo
quien es propietario de esa cosa puede entenderse que se encuentra afectado en
su derecho por el menor valor de la cosa a partir del accidente. Y acá vemos
una serie de plenarios vinculados, justamente, a esta cuestión.
Vamos a pasar ahora, a avanzar en lo que sería la ejecución de ésta
sentencia. Como dijimos, el “quantum” de la condena es de carácter
solidario, y llega a una suma de Capital a la cual debe aplicársele el interés
de tasa pasiva del Banco Nación de acuerdo a los plenarios vigentes: hablamos
de la Cámara Civil de la Capital Federal. Y pasamos aquí a lo que constituye
la ejecución de sentencia.
La ejecución de sentencia –en este caso una sentencia de
conocimiento- debemos decir que se integra con tres etapas: la etapa
“preparatoria” de la ejecución que constituiría la liquidación; la etapa
de “ejecución” propiamente dicha, que comienza con el embargo, la citación
de venta y la sentencia de remate; y luego el “cumplimiento de la sentencia”
de remate. Vamos a ver ahora estas distintas etapas.
Requerimos en primer lugar, como habíamos dicho, la existencia de
un “título ejecutorio”. Los “títulos ejecutorios” que son de
naturaleza judicial, como decíamos, están referidos en los artículos 499 y
500 del CPCCN, de modo tal que podrían ser en el mismo orden, no solo una
sentencia de conocimiento que condene, sino también por ejemplo una multa
impuesta por el Juez a alguna de las partes, o la ejecución de un acuerdo por
transacción -homologado- por ellas –entre las partes-, o también el cobro de
honorarios profesionales. Estos distintos actos jurídicos procesales pueden ser
y son de hecho objeto de ejecución por el mismo procedimiento. Tenemos entonces
que requerimos para ser ejecutado una suma líquida, es decir una suma concreta,
y acá tendríamos el capital –como veíamos anteriormente-, más los
intereses a la fecha de la liquidación. Es decir que es necesario aplicar una
liquidación que nos lleve a saber cuál es el “quantum”, a cuanto
asciende la condena. Esta es la etapa –insisto- preparatoria de la ejecución.
Luego pasamos a la “etapa inicial” de la ejecución que se compone también
de tres pasos fundamentales. En primer lugar nos encontramos con la traba del
embargo que constituye un paso ineludible de acuerdo al artículo 505 del
CPCCN, es decir que trabado el embargo y este embargo puede hacerse sobre toda
clase de bienes, corresponde citar de venta. La citación de venta
no es necesariamente para vender la cosa en el momento sino que es técnicamente
denominada así “citación de venta”, pero que importa la citación para
oponer excepciones. En su caso, la traba del embargo podría ser y vamos a ver más
adelante con más detalle, por ejemplo en el Registro de la Propiedad Inmueble
si hablamos de un inmueble, porque el inmueble es una cosa registrable. Tiene
que ser por supuesto el inmueble del condenado, o del ejecutado o que fuera
establecido así en la sentencia, en este caso del tercero. Luego, una vez que
se traba el embargo el afectado por la medida tiene que ser notificado por cédula,
o sea tiene que ser emplazado formalmente por una cédula judicial, de modo tal
que él pueda oponer excepciones, es decir defensas que pudieran existir contra
esa medida cautelar ejecutoria que se intenta. Esas excepciones se deben
interponer dentro del quinto día de que formalmente y por cédula tomó
conocimiento el afectado que tiene un bien embargado: Y puede oponer defensas,
por ejemplo falsedad de la ejecutoria: supongamos que hubo un error en la decisión
judicial y no fue él la persona condenada y por tanto podría presentarse al
juez y decir: “Señor juez yo no soy la persona condenada porque si bien estoy
nominado en la sentencia no fui condenado”, entonces opone una excepción de
falsedad de la ejecutoria, es decir no es que sea “falso” el juicio ni
“falsa” la sentencia, es un término técnico, una forma de decir “a mí
no me afecta esa sentencia de condena”, y esta medida por tanto contra mis
bienes tiene que ser levantada, en términos llanos: falsedad de la ejecutoria.
Podría ser “prescripción de la ejecutoria”: otra defensa que se opone
contra el título ejecutorio que es la sentencia, o sea el título de naturaleza
judicial. La prescripción en éstos casos es de diez años. Qué quiere decir
esto: que durante diez años con la sentencia “firme o ejecutoriada” como
decíamos hoy, el acreedor o vencedor no haya hecho ni un solo paso a favor de
la ejecución de esa sentencia. Y entonces, al haber transcurrido diez años la
ley interpreta que hay un desinterés en la ejecución, de modo tal que podría
una vez transcurridos los diez años, si el bien del deudor es afectado oponerse
ésta defensa de prescripción, lo cual también liberaría al deudor
eventualmente del embargo trabado una vez ocurrido ese plazo. Otra defensa es el
“pago”. Uds. dicen: “pero como, si está embargando se supone que no pagó”,
pero qué ocurriría por ejemplo si yo como deudor le pago a mi acreedor fuera
del juicio, es decir en una oficina, en la oficina del abogado, pero en un
momento dado –puede haber un error voluntario o no- pese a ese pago –yo
tengo un recibo- extendido por el ejecutante llevan adelante la traba de embargo
de un inmueble de mi propiedad. Yo puedo ante esa situación técnica oponer la
defensa de pago acompañando el recibo que yo extrajudicialmente pagué,
imputado por supuesto a la deuda de ese juicio. Es la defensa de “pago”.
Luego “quita”, “espera” o “remisión” constituyen otras defensas
vinculadas a la obligación misma, como podría ser que en esa modalidad de pago
yo también haya obtenido una ventaja económica por haber pagado en efectivo y
todo junto, o un plazo de espera, etcétera.
Lo cierto es que todas éstas defensas, que son muy limitadas, como
podemos darnos cuenta, deben fundarse en hechos posteriores a la sentencia: esto
es claro. No puedo volver –volviendo al caso de la sentencia del proceso de
conocimiento- a discutir cuestiones que ya fueron decididas y por tanto se
encuentran pasadas en “autoridad de cosa juzgada”, es decir que tienen esa
cualidad de “cosa juzgada” y por tanto pueden ser ejecutadas. Bien,
entonces, decíamos que ésta “etapa inicial de ejecución” tenía tres
pasos: dijimos “traba de embargo” y explicábamos las circunstancias;
“citación de venta”, el alcance de éste término; y luego la “sentencia
de venta o remate” a la que se refiere el artículo 508 del CPCCN. Es decir,
si se traba embargo, se cita luego –corresponde citar de venta- es decir citar
por cédula al demandado para que oponga excepciones y no lo hace, corresponde
como paso siguiente dictar la “sentencia de venta o remate”, que solo se
limita a “mandar a llevar adelante la ejecución en todo o en parte”. De
modo tal que se dicta una “sentencia de venta o remate”, una decisión
judicial, que lo único que hace es decir “siga adelante con la ejecución”.
Y vamos a ver entonces hasta ahí el proceso en éstas condiciones.
Pasamos así a la tercera etapa; de las preparatorias que era el
tema de “liquidación” pasamos a la “ejecución”, que ya vimos: el tema
del embargo, citación de venta y sentencia de remate,
pasamos a la tercera etapa de la “ejecución de sentencia” que constituye la
preparación para la subasta del bien. Sigamos con el ejemplo del embargo, por
supuesto si no hay embargo no hay posibilidad de ejecutar nada. Si no tengo un
bien afectado para ser ejecutado, me refiero del punto de vista del acreedor, es
inútil continuar con el proceso, porque no se puede: no puedo continuar
ejecutando algo que es abstracto y que no lo tengo. Bien, entonces el embargo es
ineludible. En este tema el art.561 primer párrafo del CPCCN nos dice que
constituye un requisito para el trámite de cumplimiento de la sentencia de
remate: el embargo. Así que no es que lo pueda establecer yo sino que la propia
ley lo dice. Lo embargado puede ser: dinero, bienes muebles o semovientes, o
bienes inmuebles. Si hablamos de dinero embargado en alguna cuenta, por ejemplo,
es decir cuando lo embargado fuere dinero, una vez firme la sentencia el
acreedor, dice el art.561, segundo párrafo del CPCCN, deberá cumplir éstos
pasos: en primer lugar practicar la liquidación de “capital, intereses y
costas”, porque yo necesito saber con precisión cuanto es lo que se debe.
Entonces, el Código le exige al acreedor que fue digamos el agresor contra -de
alguna forma- el o los bienes objeto de la ejecución. Practicada la liquidación
en primer lugar, correr traslado de la ejecución contra el ejecutado quien
contra esa liquidación puede oponer del artículo 503, 504. Y en tercer lugar
-una vez que ha corrido traslado- corresponde, si no se han opuesto defensas,
aprobará la liquidación; si se opusieron defensas, el juez deberá decidir la
impugnación, como por ejemplo si se liquidaron mal los intereses, o si puso un
rubro de capital que no correspondía, etcétera. Y una vez aprobada la
liquidación –hablamos siempre de dinero depositado- corresponde dar pago al
acreedor. Y aquí entra a jugar el artículo 590 inciso 1º del CPCCN como una
cuestión importante, porque por supuesto corresponde dar pago al acreedor, pero
“siempre que no existiere otro acreedor preferente o privilegiado”, situación
que se presenta, por ejemplo en orden a las costas de la ejecución, con el
abogado de la parte vencedora frente a su propio cliente. No nos olvidemos que
su cliente llegó a la sentencia gracias a la actividad de su letrado. Entonces,
tiene que tener en ese sentido una “preferencia”. O “privilegiado”, y acá
hablamos de privilegio hablamos de Derechos Reales, y hablaríamos de una
hipoteca por ejemplo, u otro privilegio establecido por el Código Civil.
Subasta de muebles o semovientes. Los muebles o semovientes, bueno,
los muebles pueden ser registrables o no registrables. Si son muebles
registrables, la única forma de materializar la medida es con la inscripción
en el Registro de la medida dispuesta por el Juez, del embargo ejecutorio. Y si
no fueran registrables, caso de muebles, cosas comunes, hay que tramitar un
mandamiento de embargo y, de acuerdo al artículo 573 del CPCCN corresponde
aplicar el procedimiento allí previsto. O sea que en caso de haberse realizado
el embargo de una cosa mueble no registrable en su domicilio, puede oponer
excepciones. Debe notificársele en primer lugar la existencia del embargo, pero
también debe o tiene la necesidad de decirle al Juez si esos bienes -a su vez-
se encuentran afectados en relación a otro proceso, por ejemplo. O si se trata
de un bien prendado: la hipótesis de que caigan en el domicilio del deudor y le
embarguen por ejemplo un equipo de música, o un televisor, cualquier equipo de
esa naturaleza que llevan un número de registro y podrían ser objeto de una
prenda que a su vez compró en cuotas.
Bien, la otra hipótesis de cumplimiento del embargo y su carácter
ineludible, se plantea en relación a la subasta de inmuebles. En relación a la
subasta de inmuebles, debemos decir que existe la necesidad de cumplir
requisitos o recaudos previos, necesarios a la citación. Yo tengo aquí a modo
de ejemplo, he traído una presentación que, podemos ver, es un escrito
judicial. En este escrito judicial se pretende cumplir, la idea es cumplir la
“etapa de ejecución” respecto de un inmueble. Y entonces, ¿qué es
necesario cumplir? Es necesario cumplir, como dice acá la referencia,
requerimos informes en relación al inmueble para establecer la deuda por
impuestos, tasas y contribuciones que tenga el inmueble, expensas comunes para
el caso de tratarse de un deudor cuyo inmueble objeto de la ejecución esté
sometido a Propiedad Horizontal, y un informe de las condiciones de dominio,
embargo e inhibición en el Registro de la Propiedad inmueble cuya vigencia es
de 60 días. Y también la intimación al deudor a acompañar el Título, o sea
en realidad es el instrumento público que constituye la escritura donde se
encuentra asentada su titularidad dominial. Esto es una forma en este escrito,
de tratar de demostrar cual es la presentación judicial. La presentación
judicial en estos casos se trata de los pasos tendientes a cumplir los recaudos
de la subasta de ese bien. Entonces, tenemos que hacer una referencia en el
escrito a la necesidad de “intimar al deudor a acompañar el Título de
Propiedad”. Para el caso de que el deudor no lo acompañe, se deberá requerir
a su costa un segundo testimonio; un segundo o tercero, depende de lo que
pudiera haber expedido (informado) en su momento el Registro. En relación a lo
que constituyen los informes de oficinas públicas, es necesario el informe u
oficio a la Municipalidad para que establezca, dé cuenta de cual es la deuda
por “alumbrado, barrido y limpieza” o cualquier otra mejora que corresponde
en relación al inmueble objeto de la ejecución. También a “Aguas
Argentinas”, en este caso es la empresa a cargo, para que informe cual es la
deuda que registra ese bien en relación a ese servicio. También es necesario
contar, como decíamos, con el
informe del Administrador del Consorcio respecto de las expensas adeudadas. Y
también un informe al Registro de la Propiedad Inmueble para que diga cuales
son las condiciones de “dominio, embargo e inhibiciones” que tiene ese bien.
Es muy este último aspecto. Uno puede pensar: “bueno, si yo tengo el Título
de Propiedad –por alguna circunstancia particular-, lo acompaño al expediente
y con eso evito tener que librar un oficio al Registro de la Propiedad
Inmueble”. Pero esto no es así. Fíjense ustedes acá tenemos lo que
constituye un “folio real”. El “folio real” viene acompañado cuando se
requiere el informe al Registro de la Propiedad Inmueble consta la necesidad de
identificar registralmente o catastralmente la propiedad; no ya por el nombre de
la calle y el número que también se encuentra identificado, sino el
“registro catastral”. Esto permite determinar los antecedentes dominiales,
la titularidad sobre el dominio del inmueble, y vamos a ver ahí que va a
informar quien es el titular de ese inmueble, y también cual es el número con
el cual se inscribió ese Título. Es decir que figura ahí de acuerdo a la
tramitación que en su oportunidad ha realizado el escribano de registro y que
debe coincidir con el que figura en el título acompañado en el proceso porque
el Registro de la Propiedad Inmueble es un Registro de Documentos y no un
“Registro Constitutivo de Derechos Reales”. Por ese motivo es que es
necesario el Título de Propiedad también y no basta con tener el informe de
dominio. Pero, decía, que el número informado de trámite por el Registro debe
coincidir con el que figura en el Título de Propiedad ¿Porqué? Porque podría
yo tener un Título que no es el último expedido, y si fuere así no puedo
establecer que pueda existir una “Buena Fe Registral” amplia. Necesito por
tanto una coincidencia entre el número de trámite del Título en el Registro
con el que figura en el Título mismo, en el instrumento público me refiero. A
su vez, éste informe que es copia del “folio real”, la información consta
si existieren “gravámenes o interdicciones sobre el bien” en cuyo caso, si
hubiere un embargo sobre esa propiedad, y como vemos acá que establece el artículo
575 del CPCCN, corresponde comunicar al Juzgado –acá dice “a los jueces
embargantes o inhibientes”, pero en realidad es al Juzgado donde tramita la
causa-, para que el respectivo embargante –esto está informado insisto acá-,
informe si va a reclamar su crédito en el Juzgado donde tramita la ejecución.
Y si existieren acreedores hipotecarios, como podría ser el caso de haberse
constituido una hipoteca en Primer o Segundo grado, también esa información la
va a dar éste mismo “folio real”, deberán ser citados –esos acreedores
hipotecarios- para que hagan valer sus derechos. Y si son, en el caso de una
ejecución, de un grado anterior o “privilegiado” frente al que ejecuta,
tienen derecho a pedir que se eleve la subasta, la “base de la subasta” del
bien, hasta alcanzar su propio crédito. Y hay una tercer columna que son las
“cancelaciones” de éstos créditos.
Como vemos es un tema técnico pero yo quiero volver un poquito al
escrito. En síntesis, requerimos que en el escrito, de acuerdo a lo explicado:
al deudor, el Título que debe ser acompañado de acuerdo a su intimación;
informes al Gobierno de la Ciudad o a la Municipalidad para que de cuenta de las
deudas, mejor dicho los “créditos” respecto de la Municipalidad o
“deuda” del deudor que registra ese bien; “Aguas Argentinas”; también
las expensas en caso de existir un crédito de expensas a favor del consorcio; e
informe al Registro de la Propiedad Inmueble. Esto que está en distintos
colores como acá se puede establecer, es lo que una vez que se presenta este
escrito ante el Juez, hagamos la hipótesis de que esto fuera una resolución
judicial, tenemos que constatar como abogados que el Juzgado ha ordenado la
producción de todas éstas medidas en forma simultánea, es decir que se ha
ordenado efectivamente la intimación de acompañar el Título al deudor, que se
imponga el libramiento de oficios, requiriendo a “Aguas Argentinas”, y también
al Gobierno de la Ciudad que de cuenta de cuales son sus créditos, y al
Administrador del Consorcio que informe su crédito por expensas, y al Registro
de la Propiedad también para que informe cuales son las “condiciones de
dominio”. Una vez cumplidos, es importante destacar antes de avanzar, que el
informe al Registro de la Propiedad Inmueble tiene una vigencia de 60 días que
son hábiles, o sea, en términos procesales corresponde contarlos. Una vez
transcurridos esos 60 días si a ese momento el acreedor no logra que el Juez
ordene la subasta, es decir que el Juez disponga la resolución que manda que
designe al martillero y dispone la subasta del bien, hay que actualizarlo
nuevamente. Es decir, hay que llevar nuevamente otro informe. Estos son los
problemas que, a veces, por tratarse de una cuestión muy técnica demoran el trámite
de una ejecución.
Lo que vamos a ver ahora, volviendo un poquito a lo que es la
esencia misma de esta actuación, vamos a ver lo que constituye una “Audiencia
de Pago”. Y digo así, “Audiencia de Pago”, porque muchas veces hablamos
de “Audiencia de Conciliación”. El Juez tiene facultades ordenatorias que
el Código Procesal le da, puede disponer en función de esas facultades
amplias, no es cierto, la presencia de las partes conciliatorias, o a los
efectos conciliatorios, en cualquier etapa del proceso. Pero ésta disposición
que por supuesto el Juez la puede ejercer ampliamente, no necesariamente debe
confundirse, ni se superpone con el cumplimiento de esta audiencia de pago. La
“Audiencia de Pago” está prevista como una instancia favorable al deudor
para tratar de evitar encarecer el costo de la condena respecto de los
intereses, de lo que constituye la actuación de los abogados, etcétera, y con
esa idea es que se realiza o se permite su realización desde que comienza el
curso del “proceso de ejecución”, y fíjense que se puede realizar hasta el
“sobreseimiento del juicio”, que es un término técnico por el cual o hasta
el cual el demandado puede llegar a ser relevado de la ejecución. Y una sola
vez se designa esta audiencia. Así, entonces, el demandado dentro de estas
etapas, es decir, desde que comienza la ejecución hasta que se hubiere
realizado una subasta, igualmente, siempre y cuando el comprador en la subasta
no haya alcanzado a depositar el “saldo de precio” por el cual el llegó a
apostar para ser el “adquirente” en la subasta, hasta ese momento el deudor
puede depositar íntegramente o hacer pago de su deuda, y quedar relevado de esa
ejecución. Por supuesto tendrá que pagar una importante suma al comprador en
la subasta porque también él se había visto perjudicado por esa acción, pero
existe hasta ese momento. Ahora bien, ésta “Audiencia de Pago” que como
digo trata de evitar el mayor perjuicio al deudor, puede disponerse “de
oficio” o “a pedido de parte”, y requiere necesariamente la concurrencia
“personal” del ejecutante y del ejecutado. ¿Cuál es el objeto de ésta
audiencia? Como decíamos: establecer la forma más rápida y eficaz de
satisfacer el crédito por un lado, y evitar perjuicios innecesarios al deudor.
Tenemos entonces que para la celebración de ésta audiencia que no es de
“conciliación” sino de “pago”, resulta necesario (a) la presentación
de una liquidación ya sea por el ejecutante o por el ejecutado, y por supuesto
necesario también, (b) un ofrecimiento del pago del deudor o ejecutado en las
modalidades que él pueda considerar convenientes, siempre que sean aceptadas
por el acreedor. Entonces, lo que vamos a hacer ahora y van a ver ustedes es una
“Audiencia de Pago” realizada entre el acreedor o vencedor del caso, y sus
deudores, es decir: el demandado –condenado-, y el tercero. Recordemos un 50%
para cada uno de ellos: existía una “solidaridad”, es decir que el
ejecutante o vencedor puede ir indistintamente contra cualquiera de ellos, sin
perjuicio de que con posterioridad entre los propios demandados puedan compensar
la ejecución hasta llegar a un punto de igualdad en el 50% que en este caso
estableció la sentencia. Mientras tanto para el acreedor, su único interés es
que le paguen indistintamente cualquiera de los dos o ambos en las partes que
puedan ser objeto de la ejecución.
Bien, vamos a hacer entonces una teatralización de ésta audiencia
sobre ésta base. Vamos a ver que acá tenemos a la parte actora en este juicio,
la Dra. Fillia que es la letrada que patrocina al actor. Tenemos acá a la parte
demandada con su letrado, el Dr. Gustavo del Blanco, que defiende a uno de los
condenados. Y el otro condenado que es el tercero citado que como decíamos fue
no solo su defendida alcanzada, sino que también permitiría la ejecución
respecto de sus bienes de lo que es la sentencia. El Dr. Merodio.
Bueno, vamos a dar comienzo a esa audiencia. Vamos a partir de la
hipótesis –como dice ahí-, que fue solicitada por el demandado conjuntamente
con el tercero citado. La hipótesis planteada entonces, para el “pago” en
esta audiencia, es que el demandado, -la demandada- tiene embargada su propiedad
por el crédito que aquí se está reclamando. Y a su vez, el tercero –o la
tercera citada-, tiene embargada una cuenta bancaria, pero en la cuenta había
solo $1.000, y entonces eso habilita a que como el acreedor –la Dra. Fillia y
su cliente- quieren cobrar íntegramente su crédito. De ahí entonces que han
mantenido el embargo con respecto al bien inmueble del deudor. Vamos a hacer
pasar a la empleada que va a levantar el acta, que invita a las partes a
presentarse. Ya ha comenzado la redacción de la audiencia, y entonces vamos a
continuar, o mejor dicho a comenzar con esta audiencia que fue solicitada por el
demandado y por el tercero.
JUEZ DIAZ SOLIMINE: Bueno, ¿Ustedes han solicitado la celebración de ésta
audiencia? Me gustaría saber si han charlado con anterioridad acerca de las
pautas, de cómo van a afrontar el pago de este crédito que está reclamando la
parte actora.
DR. DEL BLANCO (abogado
demandada): No, no hemos charlado.
DR. MERODIO (abogado
tercero): No, doctor, no hemos charlado.
JUEZ DIAZ SOLIMINE: No han conversado, pero han solicitado la audiencia. Entonces me
interesaría saber si han traído alguna liquidación a efectos de pagar el crédito.
DR. MERODIO (abogado
tercero): Si me permite, hemos concurrido con mi
clienta a esta audiencia a pedido del Dr. del Blanco, abogado de la parte
demandada, pero no consentimos nuestra intervención en esta audiencia en base a
una serie de argumentaciones que, a nuestro criterio, no nos corresponde pagar
en este expediente la suma por la cual resulta condenada. Es una cuestión de
interpretación en base a la reforma que introdujo 25.488 en el artículo 96 del
CPCCN, por el cual nosotros si bien resultamos condenados, creemos que no nos
resulta aplicable esa condena o esa extensión de condena, teniendo en
consideración para ello que el proceso se inició con anterioridad a la
vigencia de esa modificación al Código Procesal. En este caso veríamos
conculcados elementales derechos de defensa en juicio, lo cual para nosotros lo
haríamos valer en una etapa posterior que sería la etapa de “ejecución
propiamente dicha” a través de la falsedad de la ejecutoria. Reitero, venimos
a esta audiencia con el ánimo de llegar a un acuerdo que, creo, tendríamos que
charlarlo con el Doctor si existiera alguna posibilidad. Pero básicamente,
sobre la base que el condenado y el obligado último al pago en éste proceso es
el Dr. del Blanco y su cliente.
JUEZ DIAZ SOLIMINE: No sé doctor si usted estaría así, en principio, aceptaría ésta
postura y asumiría toda la ejecución por su cliente. A ver qué me puede
decir.
DR. DEL BLANCO (abogado
demandada): De ninguna manera nosotros nos oponemos
porque la condena, según constancias del expediente, la condena fue solidaria y
en ningún momento el tercero citado pidió que no se le aplicara el nuevo
procedimiento a la ley de reforma del Código, ni en sus alegatos. Ni usted
tampoco en la sentencia lo eximió. Nosotros entendemos que la condena es
solidaria y va a tener que compartir en el 50% la condena según surge de la
liquidación. Asimismo nosotros tenemos embargado un bien, y ellos tienen
solamente embargado dinero en efectivo, así que es cuestión de ponerse de
acuerdo acá en ésta audiencia y que Ud. resuelva.
DRA FILLIA (abogada
actora): Perdón
doctor, puedo hacer una...
JUEZ DIAZ SOLIMINE: Sí doctora, como no.
DRA FILLIA (abogada
actora): Me
parece que está un poco confundido en el trámite. No son ustedes los que
tienen que ponerse de acuerdo en cuanto a la intervención del tercero o al carácter
de la obligación. El tema es ver formalmente si ustedes ofrecen un pago para mi
cliente. Nosotros tenemos expedita la vía, la posibilidad de ejecutar esta
sentencia. No se cual es la propuesta. (AL DR MERODIO) Y obviamente desde ya
considero que el doctor va a hacer incurrir a su cliente en más costas, si
pretende encontrar una “falsedad de la ejecutoria” en esas razones que desde
ya sabemos todos que no son procedentes para nada. Si, la reforma procesal
justamente hace que esta nueva ley se aplique a la nueva etapa del proceso
aunque el proceso haya sido iniciado con anterioridad no tiene nada que ver al
momento en que estamos actualmente, que es el “proceso de ejecución de
sentencia” y para este momento la ley vigente es el actual artículo 96 del
CPCCN que me hace, me permite, o permite a mi cliente ejecutar la sentencia
contra usted (AL TERCERO), y contra su cliente (AL DR. DEL BLANCO) porque es
solidaria.
JUEZ DIAZ SOLIMINE: Doctora ¿Usted tendría una idea de la liquidación,
más o menos, de lo que se debe?
DRA FILLIA (abogada
actora): Sí,
básicamente aplicando la tasa pasiva, yo llego a un monto más o menos
calculando intereses y honorarios de $7.500 aproximadamente. Ese sería el monto
liquidado a ésta oportunidad.
JUEZ DIAZ SOLIMINE: Claro. Usted quería decir algo (AL DR DEL BLANCO).
Sí.
Quería aclarar que la posición de la doctora no nos conmueve para nada dado
que nosotros tenemos embargado el bien y Ud. tiene de esa manera garantizado el
crédito. Acá Ud. lo que tendría que aceptar o no aceptar es la propuesta que
le vamos a hacer acá con el tercero.
DR. MERODIO (abogado
tercero): Perdón
doctor (AL DR DEL BLANCO). Yo en ningún momento hablé de ninguna propuesta. Le
aclaro que la postura de mi cliente, la nuestra: es la de no pagar en éste
proceso. Ud. tendrá después una acción de repetición si es que nosotros
triunfamos en el tema de la resolución de las excepciones. Tendrá la
posibilidad de ejecutar en otro proceso pero no en éste. Ahora, si quiere
podemos charlar, en aras exclusivamente de lograr un arreglo, y evitar un
dispendio jurisdiccional posterior, podemos charlarlo si quiere. No se si mi
cliente estaría de acuerdo, es un tema que recién Ud. lo plantea y con mi
cliente éste tema no lo hemos charlado porque veníamos con otra idea. Podemos
charlar si hay alguna posibilidad de pago.
DR. DEL BLANCO (abogado
demandada): Hay
voluntad de charlar.
JUEZ DIAZ SOLIMINE: Yo invitaría al actor un momento si podía retirarse
un poquito de la Sala porque esto, éstas son situaciones que si estuviéramos
en una Mediación diríamos que se trata de un “caucus”, o sea una actuación
privada –digamos- que permite o facilita, a veces, a quien interviene entre
las partes poder “aceitar” o mejorar un poco más la posibilidad de llegar a
un acuerdo y al cumplimiento de la condena ¿no?
DRA FILLIA (abogada
actora): Espero
que no haya sido en vano la comparecencia de mi cliente. Desde ya descontamos la
propuesta.
JUEZ DIAZ SOLIMINE: Si, vamos a ver si la podemos lograr entre los dos. Le
pediría si pueden esperar afuera de la Sala y enseguida los llamamos.
DR. MERODIO (abogado
tercero): Doctor
del Blanco, escucho su propuesta.
DR. DEL BLANCO (abogado
demandada): Según
la actora la liquidación asciende a la suma de $7.500, porque la condena fue de
$5.000, más lo presupuestado $2.500: $7.500.
DR. MERODIO (abogado
tercero): Y
están pendientes los honorarios de la doctora Fillia.
DR. DEL BLANCO (abogado
demandada): Están
pendientes los honorarios de la doctora Fillia, y están pendientes nuestros
honorarios también, doctor.
DR. MERODIO (abogado
tercero): ¿Usted pretende cobrar los honorarios contra mi
parte?
DR. DEL BLANCO (abogado
demandada): No,
no. Están pendientes nuestros honorarios.
DR. MERODIO (abogado
tercero): Ah! Ud. habla de los nuestros.
DR. DEL BLANCO (abogado
demandada): De
los nuestros. De nuestros honorarios. Todas las cuestiones de costas que
encarecerían más el proceso. La voluntad de mi cliente es llegar a un acuerdo
para no llegar a un remate que encarecería mucho más. Con publicidad,
designación de martillero. Entonces, nosotros estamos dispuestos a abonar el
50% de los $7.500.
DR. MERODIO (abogado
tercero): Y estarían dispuestos a pagar el 50% de los
honorarios de la doctora Fillia.
DR. DEL BLANCO (abogado
demandada): A
Ud. ¿qué le parece?
DEMANDADA:
¿Y cuánto sería?
DR. DEL BLANCO (abogado
demandada): Y
los honorarios de la doctora Fillia, si ya estamos en etapa de ejecución, hay
que agregar los honorarios de la ejecución no mucho, pero le conviene.
DEMANDADA:
Ah, entonces sí.
DR. DEL BLANCO (abogado
demandada): Sí,
en ese caso doctor Merodio podríamos llegar a un acuerdo.
DR. MERODIO (abogado
tercero): ¿Cuál es la idea? ¿Estarías en condiciones de
pagar el 50%?
TERCERO: Si
hay alguna forma de pago, pero sí, en principio sí.
DR. MERODIO (abogado
tercero): Por lo que me dice mi cliente estaríamos de acuerdo
en compartir la totalidad de la sentencia por mitades, por una cuestión
estrictamente y como ya le dijimos anteriormente, de evitar un dispendio
jurisdiccional.
DR. DEL BLANCO (abogado
demandada): Mas
que un dispendio jurisdiccional, un dispendio de costas que encarece el proceso,
y que va en contra del patrimonio de nuestros clientes, y en este caso de mi
cliente que es el más afectado por el embargo del bien.
DR. MERODIO (abogado
tercero): Perfecto doctor. El tema es así: la idea es, si
acepta la parte actora, hacerle un ofrecimiento de pagarlo en cuatro cuotas
iguales y consecutivas. Dividir el monto total en cuatro cuotas. Y los
honorarios de la doctora Fillia por supuesto, ofrecérselo pagar en la primer
cuota ¿no?
DR. DEL BLANCO (abogado
demandada): Perfecto.
JUEZ DIAZ SOLIMINE: ¿Estaría bien así?
DR. MERODIO (abogado
tercero): ¿Usted está de acuerdo en eso?
DR. DEL BLANCO (abogado
demandada): Sí.
JUEZ DIAZ SOLIMINE: Voy a llamar a la parte actora, para hacerla pasar.
DR. DEL BLANCO (abogado
demandada): ¿Cuatro cuotas?
DR. MERODIO (abogado
tercero): Cuatro cuotas mensuales y consecutivas y los
honorarios de la doctora Fillia con la primer cuota. ¿Le transmite Ud. la
propuesta doctor?
JUEZ DIAZ SOLIMINE: Yo la transmito. Acá, ambas partes van a llegar a un
acuerdo con Uds. en cuanto al pago de todo lo que se adeuda, los honorarios de
la doctora también. El 50% cada uno va a poner, descontando la parte embargada
en la cuenta, y ellos proponen la posibilidad de pagarla en cuatro cuotas. No sé
si Ud. y su cliente están de acuerdo.
DRA FILLIA (abogada
actora): No,
cuatro cuotas no estaríamos en condiciones de aceptar.
JUEZ DIAZ SOLIMINE: Cuatro cuotas no. Al actor le pregunto. ¿Usted
considera que cuatro cuotas no? ¿Cuántas cuotas podrían ser?
ACTOR: Y, no sé doctor, el pleito ya está en etapa
de definición. Se ha demorado mucho el pago. Han cumplido, y... con dos cuotas.
Como me aconseja la doctora, en dos pienso que podríamos llegar a...
JUEZ DIAZ SOLIMINE:
¿Dos cuotas? (A LA DEMANDADA Y EL TERCERO) ¿Podrían Uds.
hacer un esfuerzo en dos cuotas que podrían ser a 30 y 60 días?.
DR. MERODIO (abogado
tercero): Mi cliente no. Y tengo que sostener esta postura
diciendo básicamente que si la doctora continúa con la ejecución va a tardar
mucho más que cuatro meses para cobrar. Es decir, lo que queremos hacer es
tratar de que la doctora cobre en la medida de lo posible pero también dentro
de los intereses de nuestros clientes, o por lo menos de mí cliente.
DR. DEL BLANCO (abogado
demandada): Yo creo que es en el único punto en que nos pusimos
de acuerdo con el doctor Merodio en este pleito. Esa es nuestra propuesta.
JUEZ DIAZ SOLIMINE:
Bueno a ver ¿Podrían ser –le pregunto a la actora- tres
cuotas e incrementando un poquito más los intereses que podrían haber de acá
a 90 días? Y podríamos llegar a cerrar esta cuestión.
ACTOR: Nosotros queremos llegar a tener una actitud de
colaboración con el Tribunal, y entendemos la situación de la parte contraria.
Como me ha explicado la doctora, señor Juez pienso que estamos en condiciones
de hacer algo. Un mes más como Ud. nos sugiere e incrementar, si ellos se
avienen, incrementar un poco la cantidad que ofrecieron.
DR. DEL BLANCO (abogado
demandada): Nosotros aceptamos las tres cuotas pero ponemos una
condición: Que en éste acto S.S. nos levante el embargo, nos cambie la medida
cautelar de embargo por una inhibición, porque para poder pagarles a Uds.
tenemos que hipotecar la propiedad de mi cliente. Entonces necesitaríamos una
sustitución de medida cautelar. El embargo por una inhibición general de
bienes que tendrían asegurados Uds. su crédito, así podríamos cumplir de esa
manera.
DRA FILLIA (abogada
actora): No
estoy para nada en contra pero siempre y cuando sea a los fines de escriturar
esa hipoteca, así que en la oportunidad de escriturar se levanta para poder
obtener el crédito, pero no ahora. ¿Sí?, o sino supeditado a esa condición.
DR. DEL BLANCO (abogado
demandada): Sí.
DR. MERODIO (abogado
tercero): Si, no tengo ninguna objeción que hacer, con la
salvedad que también se levante el embargo que pesa sobre la cuenta corriente
de mi cliente ¿no?.
JUEZ DIAZ SOLIMINE:
Bueno, creo que entonces vamos a levantar el acta en éstos términos.
Hacer un... la doctora aquí hizo una liquidación, y le vamos a agregar una
estimación de intereses por 30 días más. Transformamos la medida de
“embargo ejecutorio” sobre el bien de la demandada por una inhibición, y
luego sobre esa base consideramos terminado el juicio, porque vamos a homologar
éste acuerdo.
Se hallan reservados los derechos de autor Ley 11.723.